16 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Los residentes de la zona del estadio en Chamartín se muestran en contra de la construcción que afectará de manera grave a su entorno y habitabilidad

La 'cara B' de la remodelación del Santiago Bernabéu: Serios problemas vecinales, ruidos y un polémico túnel

El Cierre Digital en Recreación del estadio Santiago Bernabéu tras la reforma.
Recreación del estadio Santiago Bernabéu tras la reforma.
El estadio del Real Madrid, el Santiago Bernabéu, está remodelándose. Un proyecto que no solo afecta al recinto, sino a los alrededores, ya que el club blanco pretende construir dos aparcamientos, un túnel y modernizar la parada de metro. Los vecinos y comerciantes del paseo de La Habana, sin embargo, se muestran en desacuerdo con la construcción del túnel, que afectaría, según afirman, a su movilidad y a sus negocios.

Las obras para remodelar el estadio del Real Madrid, el Santiago Bernabéu, han sido uno de los temas centrales para los aficionados al club blanco. El proyecto no solo incluye una remodelación del estadio, sino también de los alrededores, modernizando la parada de metro que recibe el nombre del recinto, creando dos nuevos aparcamientos subterráneos y un túnel. Una obra que para el club contribuye a la “sostenibilidad y movilidad de la zona”. Sin embargo, para los vecinos parece ser todo lo contrario.

A finales de septiembre, el Ayuntamiento de Madrid hizo público el Estudio de viabilidad de la concesión de obra para la construcción y explotación de aparcamientos del nuevo clúster urbano Castellana-Benabéu. Un proyecto que los comerciantes y vecinos del paseo de La Habana no han visto con buenos ojos. Por ello, han creado la ‘Iniciativa vecinal en defensa del medio ambiente y contra el túnel en paseo de La Habana-Padre Damián’.

Las protestas de los vecinos

La zona del paseo de La Habana dispone de una carretera de cuatro carriles (dos para cada sentido), aparcamientos a cada lado, un total de 16 comunidades de vecinos (nueve en los pares y siete en los impares) y aproximadamente 30 comercios. Una cantidad de gente para la que el proyecto presentado por Real Madrid y Deloitte el pasado julio de 2021 parecía tener una solución sostenible.

Según se detalla en el proyecto, la construcción de estos aparcamientos, “contribuirá al desarrollo de este nuevo modelo de equipamiento urbano estratégico al servicio de la movilidad y supondrá importantes beneficios para los vecinos y trabajadores del ámbito y para el interés general de todos los ciudadanos y visitantes de la ciudad de Madrid”.

Representación de la ubicación de los aparcamientos extraída del documento del proyecto.

Sin embargo, para los comerciantes de la zona, el cambio ocasionará “un deterioro” de los negocios. Además, los vecinos afirman que las personas mayores que habitan en el barrio verán afectada su movilidad. Situación propiciada porque, tras las obras, la carretera de cuatro carriles mencionada anteriormente se verá reducida a tan solo dos, uno por cada sentido. Con lo que, afirman, habrá problema para que los coches “aparquen y entren en la zona”.

Para los comerciantes, esto supone una dificultad, ya que la mayoría de sus clientes “vienen de fuera” y no “podrán aparcar” en la calle. Una problemática que se extendería a los repartos, que tampoco podrían parar para repartir sus mercancías.

Tal y como afirmaron en declaraciones a Telemadrid algunos de los propietarios, esta situación se vería agravada con la construcción del túnel, pero ya es una realidad en “los días que hay partido”.

Las soluciones del Real Madrid

El estudio de viabilidad presentado por el Real Madrid parecía tener en cuenta todos estos problemas y una solución para ellos. Entre ellas, el problema de aparcamiento de la zona, que se vería solventado con la “construcción de 5.000 nuevas plazas de aparcamiento para residentes y/o rotación”, lo que permitiría la “recuperación de las plazas de estacionamiento en superficie para no residentes y trabajadores”. Según continúan en el escrito, esto reequilibraría “el número de plazas de no residentes que existían hasta el momento de inicio de las obras de remodelación”.

Centro de Distribución Urbana. 

Con la creación del polémico túnel, además, afirman que se producirá una “reducción de emisiones de la ciudad de Madrid” y se creará “una mayor disponibilidad del espacio para el uso peatonal en los alrededores del estadio para la mejor convivencia entre los residentes y los visitantes o asistentes a los eventos deportivos y culturales que se celebren en el mismo”.

Referente a la distribución de mercancías de los comercios y a las paradas en doble y triple fila, especialmente para los dos colegios de la zona, el proyecto también tiene solución. Por un lado, crearán un “Centro de Distribución Urbana de Última Milla en los aparcamientos del Clúster, que con más de 3.500 metros cuadrados de superficie permitirá descongestionar parcialmente su zona de influencia” y reduciría el “impacto de la Distribución Urbana de Mercancías”.

Por otro lado, solucionarán el tráfico generado con las paradas en doble fila para dejar y recoger a los niños del colegio con un punto al que denominan ‘Kiss and Drive’. “Una solución segura y permanente, sin afecciones al tráfico rodado, que permitirá dejar y recoger a los alumnos de los colegios de la calle Padre Damián”.

Obras, finalización y gasto

Tal y como se detalla en el proyecto la construcción de esta “infraestructura por importe de más de 67 millones de euros” será “financiada íntegramente por el futuro concesionario”, sin “recurrir al presupuesto público”.

Para el alcalde de Madrid, José Luis Rodríguez-Almeida, este proyecto es necesario dado que las obras del estadio van a “multiplicar la capacidad del estadio”, por lo que se exige que “haya nuevas medidas de movilidad que lo primero que hagan es beneficiar a todos los vecinos del entorno del Bernabéu”.

Zona de 'Kiss and drive' dentro de los aparcamientos subterráneos.

Sin embargo, Almeida se mostraba preocupado porque “la multiplicación de eventos” afecte a los vecinos. Y es que la remodelación del Santiago Bernabéu tiene como objeto utilizar el estadio para otros eventos —como conciertos de música u otras celebraciones— sin que el césped se vea afectado, ya que están construyendo un invernadero subterráneo para poder maximizar su uso.

Esta situación haría que a las jornadas de partidos con las que se ven afectados los comerciantes de la zona, se le sumasen otros eventos con los que el estadio podría verse ocupado la mayoría de días de la semana.

Por el momento, los afectados se han reunido con el delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, para expresarle su descontento y poder llegar a un “modelo que se ajuste a todas la necesidades”, según expresan desde el área municipal al diario ABC.

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid —que ha sido recientemente operado con éxito de una afección pulmonar—, afirmó recientemente que el objetivo inicial es terminar las obras del estadio el próximo verano. Las del túnel, los aparcamientos y la reforma del metro, podrían alargarse unos años más.

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