28 de marzo de 2024
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FIN DE SEMANA

El último caso se saldó con la condena a dos años de cárcel a los distribuidores Jaume y Antonio Solé Viñas por el citado fraude

El gran negocio oculto del cine: Inflar los datos de taquilla para recibir ayudas del Estado como práctica habitual

Una sala de cine vacía
Una sala de cine vacía
Durante muchos años algunas de las empresas relacionadas con la producción de películas en España han querido sacar más provecho del que sus propias producciones cinematográficas les proporcionaban. A través de inflar las previsiones de taquilla, las productoras se enriquecían con abultadas subvenciones del Estado que recibían como ayuda para la elaboración de sus films

Los últimos coletazos del fraude del ‘taquillazo’ en la industria del cine en España se confirmaron el mes pasado, con la condena a dos distribuidores por un delito de fraude relativo a una subvención del Ministerio de Cultura por valor de 2,2 millones de euros.

La estafa llevada a cabo por los hermanos Jaume y Antonio Solé Viñas, a través de las productoras Luna Exhibition S.L. y ABS Production-Barcelona, consistió en solicitar al Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), dependiente del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, las subvenciones millonarias mencionadas por la proyección de tres películas en base a datos de recaudación falsos. En concreto, la condena es por un delito de fraude a las subvenciones en concurso y por un delito de falsedad documental por un fraude en ayudas al cine por sesiones ficticias de las películas 'La zona muerta' (2009), dirigida por Milan Todorovic, 'Pecador' (2009), dirigida por Alessandro Perrella, y 'La última mirada' (2009), dirigida por Víctor Jorge Ruíz en 95 pueblos de España que nunca se llegaron a proyectar. El Juzgado de lo Penal número 14 de Madrid condenó a Jaume y Antonio Solé Viñas a cinco meses de cárcel y multa de cinco meses a razón de seis euros diarios.

Los ayuntamientos de las distintas localidades (especialmente de Andalucía, Badajoz, Murcia y Asturias) negaron que se hubieran proyectado esas películas. Los datos que falsearon los dos hermanos sirvieron de base para calcular las ayudas a la amortización que se concedieron mediante resolución del director general del ICAA en junio de 2011 a la productora ABS Production por las películas mencionadas, de la que es administrador Jaume Solé Viñas.

El famoso fraude del ‘taquillazo’

En el año 2015 saltó este escándalo mediante el cual algunas productoras de cine engordaban los datos audiencia de las películas que proyectaban para recibir jugosas subvenciones del Gobierno. Cuatro juzgados de Madrid investigaron a numerosos cines en España que llevaban años ejerciendo esta práctica de la que hasta entonces nadie se había percatado, o había querido o podido alzar la voz para denunciar a los responsables.

Una de las productoras que más se investigaron fue Séptimo Arte Exhibición, que proyectó durante el año 2012 las películas ‘De Mayor quiero ser soldado’, ‘Los muertos no se tocan, Nene’ y ‘Mr. Nice’. Las salas de Séptimo Arte fueron en la que más se vio la primera película, especialmente en los cines de su propiedad Mirasierra y Pequeño Cine. Varios inspectores de Cultura acudieron a estas salas y observaron que el número de espectadores era muy inferior al que la productora había declarado por al ICAA. Así, comprobaron que  el filme "De Mayor quiero ser un soldado", proyectada el 17 de julio de 2012 en el Cine Mirasierra tuvo una audiencia de 4 espectadores, mientras que la sala comunicó finalmente la cifra de 90 personas. Este fue el modus operandi que utilizaron también para el resto de los filmes que se investigaron.

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Enrique González macho, expresidente de la Academia de Cine

Este ejercicio fraudulento abrió la puerta a los poderes judiciales del país que poco a poco fueron destapando la cara más oscura de la industria del séptimo arte en España. Entre las caras más conocidas que se investigaron y, en este caso con querella incluida, fue la del expresidente de la Academia de Cine Enrique González Macho, administrador de las empresas Alta Classics y Alta Films, acusado de cometer un presunto delito de fraude de subvenciones por valor de 731.972 euros por la película 'Rosa y Negro'. La Fiscalía pidió dos años de cárcel y una multa de un millón de euros.

Miguel Bardem también fue acusado en su día de fraude documental y fraude de subvenciones por la película que produjo, ‘El rey de la montaña’. Se celebró un juicio de acuerdo en el que la defensa de Bardem pactó con la Fiscalía de Madrid la devolución de las ayudas.

De hecho, existen condenas firmes por vía administrativa relacionadas con el fraude de la taquilla, como la realizada por el productor Gerardo Iglesias con la película 'After', teniendo que devolver las ayudas del Ministerio de Cultura. También ocurrió lo mismo con la cinta 'Los años desnudos', producida por Javier Merino, a mayor gloria de su entonces esposa Mar Flores.

El caso de las películas "Flores Negras" y "La vida empieza hoy"

 

 

Otro presunto caso de fraude vinculado a las productoras de cine y que fue llevado ante la Justicia tiene relación con una empresa propiedad de Jaume Roures, el magnate empresarial que domina los derechos televisivos del fútbol en España.

Según relato de la querella de la Fiscalía, se habría falsificado la documentación sobre la película ‘Flores negras’ indicando que los costes de producción alcanzaban casi los 2,2 millones de euros y la inversión del productor rondaba los 2,1 millones, suponiendo esto una ayuda complementaria de 601.012 euros y una subvención total percibida de 633.087,10 euros. La recaudación que declararon por el film mencionado fue de 213.834,03 euros, cuando la recaudación mínima exigible para recibir la ayuda complementaria era de 210.354 euros al ser de un nuevo realizador y esto supuso una ayuda general de 32.075,10 euros. Del mismo modo lo hicieron con el film ‘La vida empieza hoy’, por el cual declararon unos costes de más de 2,2 millones y una inversión de más de 2,15 millones, por lo que también percibió unos ingresos en concepto de ayuda pública de 601.012 euros. En este caso la recaudación declarada fue de 344.570,94 euros, derivando en una subvención de 51.685,64 euros.
Las irregularidades que el Ministerio público encontró en la documentación aportada tienen que ver con un hinchamiento de la taquilla que provocó un nivel de recaudación superior al real. La Oficina Nacional de Auditoría estudió las cifras de la productora y encontró que la mayor parte de la recaudación de ambas películas se había dado en el último período de su distribución, cuando normalmente la recaudación se obtiene en las primeras semanas. Además, compararon las cifras de las películas de esta productora con las recaudaciones de otras películas más populares que se proyectaron a la misma hora en salas contiguas y las cintas Ovideo TV  ganaban ampliamente. Eso no fue lo único que no cuadraba, sino que las salas de cine donde se declaraban altas recaudaciones estaban situadas en 12 cines de los 137 en que se proyectaba.

En consecuencia, hace dos años el Juzgado de Instrucción número 15 de Barcelona admitió a trámite una querella de la Fiscalía contra el empresario  Jaume Roures y otros socios de la empresa OvideoTV por un presunto delito de fraude de subvenciones y otro delito continuado de falsedad documental. El Ministerio Fiscal denunció que la productora Ovideo TV, supuestamente falsificaron los datos de recaudación de taquilla para poder recibir subvenciones oficiales por las películas "Flores Negras" y "La vida empieza hoy" proporcionando datos de taquilla por encima de lo real y concentrando estas supuestas recaudaciones infladas en poco más de 12 cines.

Roures y Benet adquirieron una participación de Ovideo en el 2007, pero no controlaron la gestión de la productora hasta el 2013, cuando los anteriores propietarios, Quique y Antoni Camín, se desvincularon de la empresa. Esta fecha de gestión efectiva es posterior a la que supuestamente se había producido los hechos por lo que  el 17 de marzo de 2017 se decretó por el Juzgado de Instrucción 15 de Barcelona auto de sobreseimiento provisional por este caso que establecía que no se había procedido a acusar a Jaume Roures y a Josep María Benet.  En el citado auto, la jueza  sí decretó la apertura de juicio oral contra Antoni Camín y contra Ovideo TV por fraude de subvenciones.

 

Tinieblas González, el director que se enfrentó a la industria

El controvertido director de cine Tinieblas González ha denunciado en muchas ocasiones los amaños que las productoras de cine realizaban para ganar dinero a costa de las subvenciones públicas. Cuando rodó una de sus películas, 'Alma Sin Dueño', el director denunció que los problemas que tuvo con la productora Alma Ata empezaron en la fase de montaje. Tinieblas aseguró que había un buen presupuesto para postproducción, pero la productora dejó de contactar con ellos y presentó un montaje terminado a la distribuidora Filmax, empresa que lo rechazó.

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El director de cineTinieblas González

Después de la negativa, se pusieron en contacto con él para hacer otro montaje, que sí gustó a Filmax, según contó en una rueda de prensa. La productora prefirió ahorrar costes y según Tinieblas hicieron una “chapuza”. “La película figuraba como estrenada en el Ministerio de Cultura, pero no la ha visto nadie. Yo he podido verla hace un mes, gracias a que una copia recaló en la Filmoteca Vasca", denunció el director en su momento. El Ministerio reconoció que la cinta existía y que estaba calificada, pero no le dejaron verla. Cambiaron el título y las cifras que dieron sobre el número de espectadores eran de solo de media docena de personas, con una recaudación de 92 euros.  De la misma manera manifestó que no le habían dejado mirar las cuentas de la producción, aunque él era coproductor del film y que estaban pidiendo subvenciones a su nombre.

Sin duda alguna se trata de un fraude que muchas productoras de cine han llevado a la práctica de forma habitual y siendo conscientes de las cantidades millonarias que podrían ganar a través este negocio a costa de las ayudas estatales. La cara oculta del cine español sigue saliendo poco a poco a la luz, sacando las vergüenzas de una industria a menudo denostada por el público nacional.

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