Encuentran dos narcolanchas en playas gallegas: Tasadas en 380.000 euros, motor de 300 caballos, se usan para la droga

La lucha contra el narcotráfico en Galicia continúa. El pasado miércoles las autoridades encontraron dos narcolanchas varadas en las playas de Espiñeirido y O Vilar, pertenecientes a los términos municipales de Riveira y Porto do Son. Según medios gallegos, existiría la teoría de que los tripulantes de ambas embarcaciones las abandonaron debido a algo extraño que pasó en el mar. Sin embargo, fuentes de la investigación consultadas por elcierredigital.com afirman que “estas dos barcas no habían salido a hacer carga”.

Estas mismas fuentes afirman que son dos “embarcaciones típicas de lo que antiguamente se llamaban gavioteiras. La típica barca baja de poca eslora que antes se usaba para el tabaco. Pero estas ya son barcas de fibra y se usan solo para droga”. Concretamente, las dos encontradas tenían un valor de “350.000 y 380.000 euros aproximadamente”, ya que una contaba con dos motores y otra con tres. “Son motores de 300 caballos, Yamaha, lo más potente que se puede encontrar en el mercado negro. En España no se pueden vender sin licencia, así que los traen generalmente de Inglaterra”, explican nuestras fuentes. Matizan que, además de los motores, llevaban “colas de alta velocidad” para ganar más rapidez.

La razón por la que se encontraron en las citadas playas, según continúan explicando fuentes de la investigación, es que podrían haber llegado en un tráiler “una encima de otra” y que “se descargaron con marea alta”. Tal y como afirman, las barcas ya estaban preparadas. “Había en total entre las dos 60 garrafas de gasolina de 10 litros, lo que quiere decir que iban a navegar mucho y que repostarían en el mar”. Una de las barcas, además, cuenta con una raja. Sin embargo, nuestras fuentes comentan que conocedores del mar afirman que “aún rajada hubiera navegado igual porque no afecta a la estructura”.

Fotografía de una de las narcolanchas encontradas.

Para las autoridades encargadas del caso el suceso no ha sido inesperado, ya que forma parte de “una operación antigua”, a cuyos presuntos implicados ya tendrían controlados. “Sabemos quiénes eran y más o menos qué iba a pasar”.

Cuatro personas y una tercera barca

Además de las dos embarcaciones, en las playas se encontraron, según nuestras fuentes, “tres pares de huellas”. “Esto quiere decir que había tres personas, pero en realidad no había tres, había cuatro, porque cada barca lleva piloto y copiloto. Se supone que el cuarto piloto estaba en el monte, haciendo las labores de vigía, y esta gente estaba colocando las barcas y comprobando que todo estaba bien”, explican. El vigía, al ver algo raro, mandaría la orden a los demás para que se marcharan, dejando tiradas las barcas. “No encontramos ni neoprenos ni ropa, lo que quiere decir que ya estaban preparados para salir”, continúan nuestras fuentes.

De estas cuatro personas, de las que sabrían su identidad, nuestras fuentes comentan que “se sospecha que al menos una de las cuatro tiene antecedentes”.

Además, confirman a elcierredigital.com que había involucrada “una tercera barca” que no se pudo incautar porque huyó a tiempo. “Estaba en un sitio distinto para que, si está controlado un punto, el otro pueda escapar”.

Colaboración entre agentes para luchar contra el narcotráfico

Según estas fuentes de la investigación, la situación de narcotráfico en Galicia está mejorando en los últimos años debido al Centro de Coordinación existente entre agentes Policía, Guardia Civil y aduaneros que, según informan, “funciona muy bien”. “Antes había rencillas entre las jefaturas de los tres cuerpos, pero ahora no. Todo se coordina y todo es a la vez. Es lo bonito, que hemos llegado a un punto en el que la coordinación es lo importante. La información se recibe y, aunque es lento e implica mucho trabajo, también es seguro”.

Otro ángulo de una de las narcolanchas incautadas.

Esto habría permitido, tal y como informan nuestras fuentes, que en los dos últimos años hayan incautado “35 planeadoras y una fábrica con doble depósito con planeadoras sin montar” además de otras muchas cosas.

La colaboración entre agentes, además, estaría afectado a los propios narcotraficantes que, según informan nuestras fuentes, “ante la presión que hay en España, se están comprando naves y sitios donde esconder la droga cerca de Portugal, donde hay menos presión”. Sin embargo, afirman que “las autoridades portuguesas colaboran con las españolas al 100 por cien. Es una colaboración muy estrecha”.

Estas narcolanchas que han sido encontradas, tal y como continúan, podrían “cargar tranquilamente entre 2.5000 y 3.000 kilos de droga. Habitualmente los fardos de hachís son de 25 kilos y los de cocaína más o menos 25 kilos también”. Los agentes habrían incautado el equipo completo de ambas embarcaciones y sospechan que “estaban pensadas para salir al mar. Creemos que no iban a cargar, sino que iban a Portugal”, afirman.