25 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

La televisiva ingresó en el hospital de La Paz la noche del 6 de noviembre de 2016 y poco después los agentes recogieron ocho vestigios en su casa

Así murió la vedette Cristina Ortiz, 'La Veneno'

Exclusiva Cristina Ortiz, La Veneno.
Cristina Ortiz, La Veneno.
Cristina Ortiz Rodríguez, más conocida como La Veneno, falleció el 9 de noviembre en el Hospital de La Paz de Madrid, tres días después de ingresar en estado de coma en este centro sanitario, tras ser traslada en ambulancia desde su casa en el madrileño barrio de Tetuán. En el tercer aniversario de esta trágica muerte, la versión oficial de cómo se produjo sigue envuelta en una nebulosa de misterio, pero así fue cómo en realidad murió La Veneno.

Cristina Ortiz Rodríguez, más conocida como La Veneno, falleció el 9 de noviembre  en el Hospital de La Paz de Madrid, tres días después de ingresar en estado de coma  en este centro sanitario tras ser traslada en ambulancia desde su casa en el barrio de Tetuán. La versión oficial de cómo se produjo su muerte sigue estando poco clara. Según la autopsia oficial realizada por el forense Miguel Ángel Castillo Hernández, la vedette transexual, icono televisivo de los años 90, murió de forma accidental. 

Sin embargo, su hermana María Josefa Ortiz siempre ha mantenido que algunas cosas no se hicieron bien durante la instrucción del caso. Por ejemplo, el informe oficial de la la autopsia.

Portada del informe realizado por Policía Cientiifica.

Dicho informe señalaba que: “No se aprecia en todo el cuerpo ni una sola contusión, a excepción de una herida (que se suturó en quirófano) en región supraciliar derecha o frontal derecha y producida por caída” escribía Castillo Hernández. Esto contradice el informe realizado de parte por el prestigioso médico forense Luis Frontela, encargado por la hermana de 'La Veneno', María Josefa Ortiz.

Lo curioso es que también la autopsia oficial se contradice con el Acta de Inspección Ocular Técnico Policial. En esta se puede leer textualmente que unos agentes “se personan en el Hospital de la Paz (Madrid)” donde estaba en coma La Veneno y observan “como en las piernas y a la altura de ambas rodillas y pies, presenta diversos hematomas de diferentes tamaños”.

El informe elaborado por el grupo de noche de la Brigada Provincial de Policía Científica, al que ha tenido acceso elcierredigital.com, consta de siete páginas y fue elaborado el día 7 de noviembre, a las cinco de la madrugada, unas horas después de que Cristina Ortiz fuese encontrada agonizando en su domicilio y dos días antes de que muriese en el hospital donde fue trasladada. Entonces los agentes investigaban un delito de "lesiones" ya que la vedette no había muerto todavía.

Los agentes que se trasladaron al hospital obtuvieron de  “la mano izquierda” y de “la mano derecha” de la vedette “posibles restos biológicos del autor de la posible agresión”. Es decir, daban por hecho que, debido a las contusiones, la musa televisiva de Pepe Navarro se intentó defender de un ataque. Lo contrario a lo indicado en la versión oficial final,  la de una muerte accidental.

Una agresión

El informe de la Brigada Provincial de Policía Científica señala lo siguiente: "que habían sido avisados de que Cristina se encontraba ingresada en el Hospital de La Paz de Madrid en estado muy grave ya que había sido victima de un accidente  doméstico por lo que se personaron en dicho hospital observando que, según su criterio, Cristina presentaba síntomas de haber sido víctima de una agresión dadas las lesiones que presentaba".

Unos datos no tenidos en cuenta por el forense Miguel Ángel Castillo Hernández a la hora de realizar su trabajo. Tampoco se sabe del resultado de las muestras tomadas en el cuerpo de Cristina Ortiz y sí determinaron información vital sobre lo que ocurrió en el  domicilio del barrio madrileño de Tetuán con la malograda transexual.

El Acta de la Inspección Ocular Técnico Policial también recoge la Inspección Ocular llevada a cabo en la casa de la vedette donde se precipitó su trágico final, situada en la Calle Tablada nº 12, de Madrid. Un domicilio vendido poco después por los padres de Cristina. La Policía pudo entrar gracias a la autorización del Juzgado de Instrucción número 50 de Madrid.

En este piso vivía La Veneno.

Según lo que se recoge en dicha acta podemos saber la forma de vida de los últimos tiempos de La Veneno, ya que se informa de la “visible suciedad y desorden” que presidía el domicilio, así como de que en la mesita de noche había “numerosos blíster y cajas de medicamentos concretamente Adofen 20 mg, Tranxilium 50 mg, seroquel 200 mg” además de “botellas vacías de bebidas alcohólicas”.

Los agentes al llegar al domicilio se encontraron con “la puerta de entrada abierta, presentando parte de la cerradura y hoja síntomas de haber sido forzados en alguna ocasión”. La puerta daba acceso “a un pequeño distribuidor, el cual comunica por su puerta izquierda con el baño, y por la derecha al salón, desde el cual se accede a la cocina y al único dormitorio”. Las luces estaban “encendidas en el salón y en el baño”.

Cristinia Ortiz.

Tanto en el baño, como en el salón y el dormitorio se encontraron “manchas de una sustancia de color rojizo al parecer sangre”. Estas manchas se localizaron en la tapa del inodoro, en la pila del lavabo del baño, en el suelo del salón “a diez centímetros de la televisión”, en la “zona derecha” del cabecero del sofá, en el suelo del dormitorio (“concretamente en la entrada”) y en la zona entre el pie y la pared de la cama. 

Por último, también se encontraron manchas de sangre en la zona superior del colchón de la cama. Precisamente, ahí, en la cama fue donde se encontró, como ya publicó en su día elcierredigital.com, ADN de otra persona que nunca se investigó.

Según el recorrido de manchas de sangre que recoge la Inspección Ocular y, teniendo en cuenta que la autopsia oficial asegura que fue una muerte por accidente, Cristina debió golpearse en el baño, recorrer toda la casa y acabar en su cama. Una versión un tanto rocambolesca del final de la vedette y, aparentemente, poco creíble.

Sombras sobre la autopsia oficial

Así las cosas, el Acta de la Inspección Ocular vuelve a proyectar sombras sobre la autopsia que apuntaba a que su final fue accidental. Algo que se contradice con los hematomas en manos, piernas y pies y la posibilidad de que hubiera un agresor, estando así mucho más cerca de la versión ofrecida por el informe del doctor Luis Frontela, encargado por la hermana de La Veneno, María Josefa Ortiz, que de la cuestionada autopsia oficial firmada por el forense Miguel Ángel Castillo Hernández.

Cristina Ortiz en la última etapa de su vida.

Los agentes de Policía Científica también recogieron diez vestigios, sobre la tapa del inodoro, en el suelo del baño, en la pila de lavabo frente al inodoro, sangre en el suelo del salón, sangre en el cabecero del sofá que estaba en el salón, restos en el suelo del dormitorio y otro vestigio a metro y medio del anterior, entre la pared y el pie de la cama y un último resto en la zona superior del colchón de la cama.

A las 4 horas y 20 minutos de la mañana los dos funcionarios policiales se trasladaron al hospital de La Paz donde estaba ingresada Cristina Ortiz para seguir con las diligencias y recoger otros dos vestigios en las manos de La Veneno, restos biológicos del autor de la posible agresión.

A pesar de que la muerte de La Veneno sigue cerrada judicialmente, son muchas las pruebas que apuntan que el caso de Cristina Ortiz se cerró demasiado deprisa sin tener en cuenta detalles muy importantes para el esclarecimiento de su muerte. 

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