25 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

En 1993 dictó sus memorias al escritor amigo de la 'entrañable' Marta Gayà y un año antes se citó con la periodista inglesa

Juan Carlos I se confiesa de nuevo: Los otros biógrafos del Rey, de José Luis de Vilallonga a Selina Scott

Juan Carlos y Selina Scott en 1992.
Juan Carlos y Selina Scott en 1992.
Juan Carlos I ha vuelto a compartir sus pensamientos con una periodista. En este caso, se trata de la francesa Laurence Debray. No es la primera vez que el que fuera Jefe del Estado utiliza periodistas de confianza para confesarse. En 1993 dictó sus memorias a José Luis de Vilallonga, escritor amigo de la 'entrañable' Marta Gayá, y un año antes concedió una polémica entrevista a la periodista inglesa Selina Scott, íntima de su cuñado, el exrey Constantino de Grecia.

El libro de Laurence Debray Mi rey caído ha levantado una gran polvareda a pesar de que el libro aún no se ha traducido al castellano. Juan Carlos I se confiesa con su amiga desde su exilio en Abu Dabi. Debray, hija de intelectuales vinculados con la izquierda latinoamericana, se ha declarado fan del ex Jefe del Estado español desde su adolescencia y ya hace siete años participó en la filmación de un polémico documental sobre la figura del monarca. 

El Emérito vuelve así a una de sus prácticas habituales. Confesarse de forma calculada con periodistas de confianza. El monarca español ya accedió a que se publicara en 1993 un libro biográfico autorizado. El autor de El Rey fue José Luis de Vilallonga. Nacido en Barcelona en 1920 y fallecido en Mallorca en 2007, Vilallonga era Grande de España, monárquico seguidor de don Juan, el padre de Juan Carlos, y militante socialista. Entre 1950 y 1977 vivió exiliado en París donde trabajó como escritor, periodista y actor de cine, rodando en películas míticas como Desayuno con diamantes (1961) junto a Audry Hepburn o Giuletta de los espíritus (1965) a las órdenes de Federico Fellini. 

En los 80 y 90, el escritor formaba parte de la corte de Mallorca que rodeaba a Juan Carlos y fue unos de los protectores del romance entre el monarca y Marta Gayà. El propio Vilallonga contaría en sus memorias cómo esa amistad le posibilitó ser el biógrafo del Rey. Según el escritor, Juan Carlos había empezado a trabajar en sus recuerdos con Miguel de Grecia, historiador y primo de la Reina Sofía. Sin embargo, la intervención de Marta Gayà hizo que el escogido para ser el biógrafo oficial del soberano español fuera el aristócrata. 

Juan Carlos y José Luis de Vilallonga durante sus charlas para el libro 'El Rey' (1993). 

En esas mismas memorias Vilallonga recordaba que el libro se publicó tal cual y que el entonces Jefe de la Casa del Rey, Sabino Fernández Campo, sólo consiguió que se censuraran unas declaraciones del monarca sobre el 23-F. El general Fernández Campo nunca quiso que el Rey publicara sus memorias. Tres años años después, sin embargo, también la Reina se confesaría en otro libro. En este caso eligió como biógrafa a Pilar Urbano

En definitiva, ambos libros fueron una de las pocas ocasiones en las que los Reyes se confesaban ante periodistas. En las mismas fechas del libro de Vilallonga, el monarca concedió una entrevista internacional a la inglesa Selina Scott que también estuvo llena de polémica. 

La visita de Selina a Mallorca

En 1992 España se había convertido en el centro de las miradas de todo el mundo gracias a los Juegos Olímpicos celebrados en Barcelona, la Exposición Cultural de Sevilla y la Capitalidad Europea de Cultura en Madrid. El país se publicitaba como un ejemplo de modernidad y el Rey Juan Carlos centraba todas las miradas. Durante las vacaciones en Mallorca una cadena de televisión británica decidió realizar una entrevista al monarca y mostrar su día a día. Se trataba de la cadena privada ITV que ya había realizado un polémico documental que tenía como objetivo acercar al pueblo inglés la figura del Príncipe Carlos, muy enturbiada en ese momento por el escandaloso divorcio de Diana de Gales.

El Rey Juan Carlos apenas concedió entrevistas televisivas a lo largo de su vida y las que hizo siempre fueron para cadenas extranjeras. La televisión estadounidense y también la francesa ya habían emitido en horario de máxima audiencia una buena ración de campechanía borbónica. Sin embargo, en España hubo que esperar a que Jesús Hermida le entrevistara en enero de 2013 con motivo de su 75 cumpleaños. 

El reportaje de Selina Scott, que consiguió penetrar en la intimidad real, fue polémico por la imagen frívola que arrojaba del monarca, con momentos memorables como aquel en el que el monarca no era capaz de arrancar una moto. La conexión entre el monarca y la periodista era más que evidente. Tal vez porque contaba con un intermediario de excepción: el exrey Constantino de Grecia, cuñado de don Juan Carlos.

Nunca se pudo descubrir pero la sombra del comisionismo sobrevoló la entrevista y se habló de la "mordida" que se habría llevado el exrey heleno por facilitar a la cadena británica el acceso al Jefe del Estado español. Constantino de Grecia no pasaba por un buen momento económico a principios de los 90 y toda la prensa inglesa se había hecho eco de ello. Además, la amistad de Selina y el hermano de doña Sofía tampoco había pasado desapercibida para los tabloides ingleses. Un grado de intimidad que también pareció repetirse, aunque de forma más fugaz, con el monarca español.

“Ese verano nos ponían muchas trabas para trabajar. Coleaba todavía lo de Marta Gayà y no les hacía gracia que registráramos la presencia de Selina Scott cerca del Rey. Yo no lo entendía, porque al fin y al cabo esa entrevista se iba a emitir en televisión. Y nos pusieron todavía muchas más dificultades para ejercer nuestro trabajo”, asegura a elcierredigital.com un fotógrafo habitual en el seguimiento de los veranos de la Casa Real en Mallorca.

Selina Scott, años después de su entrevista con el monarca español, firmó un contrato millonario con la cadena norteamericana CBS que le encargó una serie de reportajes sobre la situación en Kenia, como también alrededor de celebridades como el exbeatle George Harrison, Bono de U2 o el ajedrecista Garry Kasparov. Luego firmó por una cadena rival, NBC, para presentar su propio show en prime time.

Durante sus años en Estados Unidos realizó, en 1995, una entrevista sobre Donald Trump que años más tarde, cuando se convirtió en presidente de los Estados Unidos volvió a tener relevancia. Durante la charla con Scott se mostraba como hombre hedonista, exhibicionista de su riqueza y defensor de Bill Clinton. Tras sus años americanos, Selina volvió a Reino Unido y firmó un contrato de un millón de libras con Sky.

Lejos de la televisión, hoy Selina vive en una granja de 81 hectáreas al norte del Reino Unido y se dedica a vender una línea de ropa con fibras naturales. Es férrea defensora de los derechos de los animales y del feminismo.

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