29 de marzo de 2024
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FIN DE SEMANA

El también secretario general del PCE y portavoz de Izquierda Unida en el Congreso es leninista y afín a Pablo Iglesias

La cara B de Enrique Santiago, el secretario de Estado comunista que no aplaudió a Zelenski

/ Enrique Santiago
El secretario de Estado de la Agenda 2030 y secretario general del PCE, Enrique Santiago, no aplaudió en su visita virtual al Congreso al presidente ucraniano Volodímir Zelenski, que ilegalizó al comunismo de su país y se muestra permisivo con elementos neonazis.

Ciudadanos ha pedido la dimisión del secretario de Estado de la Agenda 2030, Enrique Santiago, que fue uno de los diputados que no aplaudió al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, tras su discurso en el Congreso de los Diputados.

Diputados del BNG y las CUP tampoco lo hicieron. Albert Botran, de la formación independentista catalana, ha explicado que "para los que trazan la línea de buenos y malos, ciertos abusos cometidos en Ucrania desde 2014, así como la tolerancia con el neofascismo, se vuelven invisibles. Las muertes en la revuelta del Maidán, tanto las de Kiev (alrededor de un centenar) como las cuarenta y seis del brutal ataque a la Casa de los Sindicatos de Odessa, no han sido objeto de investigaciones independientes".

Botran dice que "la posterior ilegalización del Partido Comunista, en 2015, también cae en el olvido, pese a que fue el precedente de la ilegalización de otros partidos ahora durante la guerra. Entre los cuales se encuentra la segunda fuerza en la Rada ucraniana, la Plataforma de Oposición Por la Vida, una formación que se manifestó claramente contra la agresión de Putin y que expulsó al único miembro que se pronunció a favor. Sin embargo, contrasta con la tolerancia con los elementos neonazis".

Vida y milagros de Enrique Santiago

Enrique Santiago Romero nació el 18 de julio de 1964 en Madrid. Es licenciado en Derecho, Máster en Derecho Financiero y Tributario y Máster en Gestión y Administración de fundaciones y entidades no lucrativas. También es especialista universitario en Derecho del Trabajo y Seguridad Social y en derecho de asilo y refugio.

Fue secretario general de la Unión de Juventudes Comunistas de España entre 1990 y 1992, secretario general de la Comisión española de ayuda al refugiado entre el año 2000 y el 2007, secretario general del Instituto de Estudios para América Latina Asia y África entre 2009 y 2012, vicepresidente de la Federación Española de Asociaciones de Derechos Humanos entre 2002 y 2004 y fue asesor de la mesa de conversaciones de paz entre la guerrilla de las FARC y el gobierno colombiano entre 2012 y 2016.

El portavoz de IU en el Congreso fue miembro del Buró de la asociación Internacional de juristas demócratas y presidente del Foro de abogados y abogadas de izquierdas entre 2012 y 2017, cuando fue elegido secretario general del PCE.

Santiago, muy cercano a Pablo Iglesias, orgulloso leninista y criticado desde medios conservadores por tener un importante patrimonio personal (tiene un ático con dos terrazas en Chamberí valorado en casi un millón de euros y una casa en Asturias), asumió el liderazgo del PCE y acopló el ritmo de este partido al son de Podemos.

Las líneas estratégicas que asumió el PCE hace cinco años fueron las del marxismo-leninismo, sectorialización y construcción de poder y unidad popular para avanzar hacia la III República.

Tres décadas con Santiago

Cayó el Muro y Julio Anguita intentaba levantar al PCE dentro de Izquierda Unida. 'El Califa' se encontró algunos apoyos para hacerlo. Y entre ellos destacaba un joven Enrique Santiago, que en 1990 se convertía en líder de la Unión de Juventudes Comunistas de España (las juventudes del PCE).

Enrique Santiago. 

La caída de Anguita a finales de los noventa situó a Santiago entre los comunistas llamados a sucederle. Pero el PCE apoyó en el 2000 con fuerza al histórico Paco Frutos, que se estrelló en las generales de ese año y perdería las primarias de IU frente a Gaspar Llamazares.

Enrique Santiago intentó 'vengar' la afrenta para el PCE en 2004, pero IU eligió a Llamazares que acabó de hundir más aún a la coalición. Pero el triunfo de Zapatero, y la celebrada cercanía del PSOE e IU tras años de guerra entre Felipe González y Julio Anguita, posibilitaron la derrota por la mínima del abogado.

La elección de Santiago en el PCE en 2017 llegó cuando nadie pensaba que iba a lanzarse a la primera línea política tras haber perdido las primarias de 2004 de IU contra Gaspar Llamazares, a pesar de haber vencido al asturiano en voto popular. En 2015, tras haber ayudado a Cayo Lara a tomar el poder en la coalición, dimitió de la cúpula de IU por su desacuerdo con el rumbo tomado por este proyecto.

Palos a Putin

Santiago ha explicado en la última edición de Mundo Obrero que está en desacuerdo con el rumbo ruso: "Vladimir Putin está perpetrando un ataque brutal sobre Ucrania, una actuación injustificable aunque Rusia tenga motivos para sentir amenazada su seguridad. Los bombardeos suponen un fracaso colectivo para todos los pueblos amantes de la paz y respetuosos con la Carta de las Naciones Unidas, base de la convivencia pacífica y del derecho internacional vinculante para la comunidad mundial".

Pero también opina que "España y la Unión Europea no deben formar parte de este conflicto, como tampoco deberían plegarse a los intereses de Estados Unidos dentro de la OTAN, sino que deberían secundar iniciativas diplomáticas activas para poner fin a la agresión rusa y contribuir a la construcción del imprescindible sistema continental de seguridad compartida".

Y pide que "recuperando la lógica y la letra de la Carta de París, es urgente realizar una conferencia internacional auspiciada por la ONU y la OSCE para empezar ya a construir una seguridad compartida que dé garantías a Ucrania, a Rusia y a toda Europa". 

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