26 de abril de 2024
|
Buscar
FIN DE SEMANA

El vicepresidente segundo del Gobierno insinuó hace unos días que Yolanda Díaz podría relevarle en un futuro al frente de Unidas Podemos

Los herederos del espíritu del 15-M quieren retomar el control del partido de Pablo Iglesias

/ Pablo Iglesias. Foto: Flickr Podemos.
Pablo Iglesias podría cerrar en 2024 una etapa de una década como dueño y señor de la izquierda rupturista española. El politólogo supo encauzar las energías del 15M para situar a Podemos como una alternativa de Gobierno que, tras frenarse los aires regeneracionistas, está ocupando un espacio más ancho electoralmente y políticamente más influyente que Izquierda Unida.

Las elecciones de noviembre de 2011 dibujaron un panorama paradójico: el Partido Popular se hacía con la mayoría absoluta, el PSOE se hundía y la izquierda rupturista apenas avanzaba a pesar de que el 15M con su aire indignado, regeneracionista e impugnador había trastocado la vida social de las vanguardias juveniles españolas. 

La falta de reflejo del espíritu de la Plaza del Sol llevó a la izquierda contestataria española a una especie de depresión desde que emergieron en las europeas de 2014 gracias a Pablo Iglesias, rodeado de una fuerza marginal como Anticapitalistas y media docena de profesores de la Complutense que habían asesorado a la izquierda sudamericana. 

Maestría en comunicación

Iglesias, que disparaba audímetros en Intereconomía TV o Trece, saltó a las cadenas estatales quizás por interés del Gobierno de Mariano Rajoy, acosado por la corrupción y la impopularidad por los recortes que ejecutó a raíz de la crisis de 2008. 

El fundador de Podemos demostró cierta maestría en materia de comunicación con 'La Tuerka'. Este influyente y oportuno proyecto contrastaba con la miopía mediática de Izquierda Unida, incapaz de distanciarse de dos proyectos en retroceso como PP y PSOE. 

La formación morada dio la sorpresa en 2014 y se convirtió en alternativa de Gobierno hasta que, tal y como ha evidenciado judicialmente, una cacería mediática coordinada desde La Moncloa y ejecutada por José Manuel Villarejo con ayuda de algunos célebres periodistas, consiguieron pinchar demoscópicamente a Podemos, lo que convino durante un tiempo al PP para evitar que el PSOE les superase. 

Futuro

Pablo Iglesias ha insinuado en una entrevista concedida a eldiario.es e infolibre.es que vería con buenos ojos que la prestigiosa ministra de Trabajo Yolanda Díaz le relevara al frente de Unidas Podemos a medio plazo. 

Yolanda Díaz. Foto: Flickr Izquierda Unida. 

Es evidente que si el Gobierno consigue agotar la legislatura, Iglesias intentará en 2024 utilizar su peso estratégico para mantenerse como vicepresidente de Pedro Sánchez. Pero si las urnas le son adversas, el madrileño podría cerrar una etapa de una década al frente de la izquierda rupturista española para dar paso a otro equipo. 

Alternativas

Gloria Elizo se ha convertido en la dirigente de Podemos más crítica con Iglesias. La vicepresidenta tercera del Congreso, y antigua 'superjefa' en la formación morada, ha dejado abierta la posibilidad de lanzar un proyecto que deje atrás Unidas Podemos. 

"Podemos ha renunciado a ser alternativa de Gobierno precisamente entrando en un Gobierno de manera subalterna. De alguna forma es el precio que hemos aceptado pagar, dejar de ser alternativa. Y si no eres alternativa a nivel estatal, en términos autonómicos lo tienes muy, muy difícil. Si encima defiendes a otras formaciones políticas territoriales, actuando como intermediario de su apoyo al PSOE, nuestras candidaturas se quedan sin espacio en sus territorios", asegura. 

Elizo ha explicado a El Confidencial que "el partido como tal está vacío. Su fuerza se ha consumido como combustible para entrar en el Gobierno. Si Podemos renuncia a ser un agente del cambio en este país y se convierte en una coalición solo electoral, y además bastante pragmática y modesta, lo suficiente como para que te dejen entrar en los ministerios, la gente que lleva años peleando por cambiar de verdad este país se aparta hacia otros espacios". 

"Herencia en decadencia"

Uno de los políticos que más atento está a los movimientos sísmicos de la izquierda es Íñigo Errejón, que sabe que tiene dos opciones con Más País: o unirse a otras fuerzas progresistas o desaparecer. Y es que la aventura en solitario de este fallido proyecto correría peligro en otra cita electoral... a no ser que PSOE y Unidas Podemos se desplomen en las urnas. 

Errejón asegura que con la entrada de Iglesias en el Ejecutivo "Unidos Podemos ha hecho de la necesidad, virtud. Como el que cobra una herencia en decadencia, ha conseguido convertir sus apoyos declinantes en entrada en el Gobierno".

Podemos, según la tesis del diputado, "se desangra en los territorios, ha perdido la mitad de su peso en el Congreso en tan solo tres años y ya no es en modo alguno el faro intelectual y cultural de la vida política española que fue. Pero sus dirigentes se sientan en el Consejo de Ministros, y pocas cosas generan tanto poder como la apariencia de poder".

Iglesias, según la tesis de su examigo, "fía su porvenir a mantenerse como socio subalterno de gobierno del PSOE confiado en que, incluso si siguen bajando, este no tendrá otra alternativa mientras subsista la polarización en el arco parlamentario". 

COMPARTIR: