25 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

La medida supondría una subida de impuestos de 2.400 millones de euros, es decir un golpe medio de 1.150 euros al año por hogar

El Gobierno rectifica su plan para eliminar la tributación conjunta del IRPF después de las duras críticas recibidas

El Gobierno pretende eliminar de manera paulatina la reducción por tributación conjunta en el IRPF. La medida, recogida en el Plan de Recuperación enviado a Bruselas, equivaldría a una subida de impuestos por valor de 2.400 millones de euros y afectaría a más de cuatro millones de contribuyentes. Ante las críticas de la oposición, Moncloa ha rectificado y finalmente no será hasta 2022 cuando un grupo de expertos valore "qué medidas fiscales son las más adecuadas" para "impulsar el crecimiento".

El Gobierno estudia eliminar la reducción por tributación conjunta en el IRPF. La medida forma parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia remitido a Bruselas para la reconstrucción económica tras la crisis ocasionada por el coronavirus, un documento que contiene las inversiones y reformas comprometidas para poder ingresar los 140.000 millones de euros de ayudas europeas.

Concretamente, en su página 341 se puede leer que "se incluye la paulatina desaparición de la reducción por tributación conjunta mediante el establecimiento de un régimen transitorio, debido a que genera un desincentivo a la participación laboral del segundo perceptor de renta (principalmente mujeres)". No obstante, cabe señalar que el Gobierno ha evitado publicar el texto completo, de más de 1.000 páginas, y solo ha difundido un resumen carente de detalles en lo que se refiere a las reformas laboral, de pensiones y fiscal. 

Extracto del resumen del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia difundido por el Gobierno.

La reducción en la base imponible del IRPF por tributación conjunta beneficia a cerca de dos millones de hogares y supone para las arcas públicas, según los últimos Presupuestos Generales del Estado, un coste de 1.000 millones de euros anuales. Si finalmente se elimina, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) calcula que el impacto de la medida implicaría una subida de impuestos de 2.400 millones de euros, lo que supone un golpe medio de 1.150 euros al año por hogar. En total, más de cuatro millones de contribuyentes de todo tipo de renta y condición se verían afectados.

De hecho, la posible reforma fiscal afectaría en mayor medida a aquellas familias o personas con ingresos bajos. Y es que los matrimonios pueden obtener una reducción de la base imponible de 3.400 euros anuales por lo que, si uno de los miembros no recibe ingresos o estos son muy bajos, la declaración conjunta puede representar una alternativa interesante.

En el caso de las parejas de hecho, solo uno de los miembros puede formar unidad familiar con los hijos menores y dependientes, ya sea la madre o el padre. Un tratamiento similar al de las familias monoparentales y que se aplica también a los casos de separación o divorcio con custodia compartida. La reducción de la base imponible en estas circunstancias es de 2.150 euros anuales.

El Gobierno, obligado a rectificar 

Tras la oleada de críticas, y a dos días de celebrarse las elecciones madrileñas, el Gobierno finalmente se vio obligado a salir al paso y aseguró, en la noche del domingo, que la supresión de la reducción fiscal por la tributación conjunta no es una medida que esté sobre la mesa.

A pesar de que la idea aparece reflejada textualmente en el plan remitido a la Comisión Europea, desde Moncloa excusaron que únicamente se hace referencia al estudio realizado por la AIReF en julio de 2020, que llegó a la conclusión de que esta reducción, en su actual configuración, generaba "un desincentivo a la participación laboral de los segundos perceptores de renta, principalmente mujeres de rentas bajas, lo que acentúa los problemas de brecha de género de la economía española". Asimismo, señalaron que se ha creado un grupo de expertos que emitirá un informe en febrero de 2022 y será entonces cuando se planteen "qué medidas fiscales son más adecuadas" para "impulsar el crecimiento y la creación de empleo". Y recalcan que "en ningún caso esta posible reforma tributaria vaya a suponer un aumento de la carga fiscal de las familias".

En cualquier caso, la propuesta de la AIReF es clara, "acelerar su paulatina desaparición mediante el establecimiento de un régimen transitorio" por lo que, de cara a los próximos meses, es más que probable que las familias españolas deban hacer frente una mayor presión impositiva.

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