Las “trampas” de los supermercados en la fiebre de las mascarillas: DIA Y LIDL se introducen con un mensaje equívoco

La irrupción de los supermercados y centros comerciales en el negocio de las mascarillas  pone bajo la lupa todo el entramado que hay detrás y la verdadera información que les llega a los consumidores finales como objetivo de ventas. La veracidad de los mensajes enviados a los clientes está en entredicho, según los expertos consultados por elcierredigital.com, y por eso toca aclararla.

Si la semana pasada fue Carrefour, esta le ha tocado a DIA y LIDL. El comunicado que ambas compañías hacían llegar a todas las redacciones de España, y que publicaban también en sus redes sociales, hacía referencia a la gran apuesta de ambos grupos comerciales por acercar, con precio y potente sistema de ventas, la importante y necesaria mascarilla al ciudadano. ¿Pero que se esconde detrás de este negocio?

Sobreprecio sobre un producto de prestaciones limitadas

Precisamente, cuando se ciernen dudas sobre la continuidad de los empleos en una de estas dos cadenas, en concreto LIDL, con paros y huelgas, como el convocado por el sindicato ELA en Navarra y todo el País Vasco, precisamente por la falta de seguridad y el exceso de horas de trabajo de las plantillas, surgen para los expertos varios interrogantes sobre esta nueva campaña de venta de mascarillas al público.

"¿Es el real el coste de 0.60 euros como nos venden en su publicidad “social”? ¿es una acción de reputación corporativa seria y formal?, o por el contrario, y como han informado otras fuentes de importadores y proveedores, ¿son mascarillas de origen asiático y no superan los 0.30 cada una en España al importador?", se preguntan.

Sin entrar a dudar de su calidad y sus certificaciones, que corresponden al Ministerio de Sanidad y a las Aduanas del Estado comprobar en su recepción, hemos analizado sus canales de venta, hemos comprobado sus cualidades y hemos visto qué ocurre cuando te dispones a comprarlas.

El resultado es el siguiente: Al comenzar por Carrefour nos encontramos que aquí se venden los pack de mascarillas “higiénicas” a 0,89 la unidad, en pack de 10 euros por 8.90 euros la caja. Estas mascarillas solo se venden de momento en los centros de ciudades como Madrid, Barcelona y poco mas, siendo, según sus propias fuentes en redes, "un proceso paulatino que irá a todos los supermercados de España". Hasta ahí todo bien, salvo que son “higiénicas” es decir, que no son sanitarias ni quirúrgicas. Este detalle se revela importante, dado que casi todas las que se producen en las fabricas españolas son sanitarias. Por tanto, el precio es ajustado al material que se vende, proporcionando un alto margen de beneficio en dicho pack accesible en los supermercados.

LIDL tras Carrefour, vende packs de 50 mascarillas a 0,60 euros la unidad.

Mientras que en las farmacias, no nos olvidemos, tienen el problema gravísimo de que venden por norma las “sanitarias” o “quirúrgicas”, cuyo precio de fabricación propia en España, o bien de importación exterior, no les permite, debido a sus encarecimientos actuales, venderlas sin arruinarse al precio de Carrefour. Y lo que es más importante, siendo infinitamente mejores y más seguras.

Confusión para el consumidor

En el caso del LIDL y DIA (cuya venta es exclusiva online por el momento) al analizar su matriz de venta online nos encontramos las siguientes cuestiones: En LIDL, en las tiendas de Madrid exclusivamente por ahora, se venden a 0,60 la unidad en packs de 50 unidades por un total de 29.99 euros: Pero aquí va el dato, se definen como “mascarilla de un solo uso con certificaciones”, sin más…ni higiénicas, ni sanitarias y sin especificar el modelo siquiera y sus características. "La confusión al consumidor en este caso es evidente desde la primera línea", afirman a elcirredigital.com los expertos consultados.

En DIA, en su comunicado subrayan que son “desechables", como único adjetivo y calificación técnica y al módico precio “social y de coste” de 0.60 euros. Para cumplir un objetivo de responsabilidad social, en el mismo texto nos indican que "han donado, asi mismo, 250.000 mascarillas quirúrgicas [en esta ocasión si deja claro su calidad y especificación técnica] a los sanitarios de varias comunidades autónomas". Ricardo Álvarez, consejero de DIA España, afirma al respecto: “Se trata de ofrecer un servicio a los clientes y no de obtener un beneficio económico". Esta venta, además,  estará solo online y una caja por usuario.

DIA la última en la venta online de mascarillas afirma que "no busca beneficio económico".

Por último, caso sangrante es Alcampo, donde en su plataforma online ofrece “mascarillas universales y desechables a 0.20 unidad”, si dar más explicaciones ni son sanitarias, ni de qué producto están fabricadas ni sus técnicas ni ningún tipo de garantías.

La realidad es que, en todos los casos de estos centros comerciales y supermercados, la verdad oculta es otra. Incluso, cuando navegas en la web de ventas online de Carrefour, donde hay packs de casi 100 euros por quirúrgicas o sanitarias y hasta de 500 por mascarillas "fpp2".

"No dudamos de la loable intención de todos los supermercados al contribuir con la venta de este objeto de primera necesidad hoy en dia, en pleno COVID19, pero no justifica ello mensajes equívocos, precios y características ambiguas, y menos todavía una competencia desleal con mensaje social incluido, generando expectativas y volcando mensajes sociales que , más ahora que nunca, deberían ser objeto de cuidado por quienes los vehiculan con animo económico y comercial en la sociedad  y el mercado español", afirman algunos de los expertos del sector consultados.

Si ya en España, caso de Mascarillas Béjar o el Grupo Mondragón (donde el Gobierno de España ha puesto en marcha un convenio no exento también de polémica en su adjudicación), estábamos en ese proceso de reindustrialización vital para el tejido de la economía española, seguramente ahora, más que nunca, es cuando con la desescalada se hará un uso masivo de las mascarillas. Por eso, las autoridades deben vigilar exhaustivamente quiénes proveen de este material, altamente recomendado o lo que viene siendo lo mismo casi obligatorio, a la población y al mercado en forma y precio adecuado. En un bien que es esencial para paliar la crisis sanitaria del coronavirus.