La sorpresa que se van a llevar miles de pensionistas con este cambio: en unas semanas

Las pensiones en España están a punto de cambiar de forma significativa a partir de 2025. El ajuste afectará tanto al cálculo de las pensiones como a los tipos de prestación que se beneficiarán de esta modificación.

La medida, enmarcada en la reforma iniciada en 2024, está diseñada para asegurar que los pensionistas mantengan su poder adquisitivo frente a la inflación. Y que las pensiones más altas también se revaloricen, algo que no ocurría hasta ahora de manera tan evidente.

Aumentos según el IPC y su impacto

Las pensiones en España se ajustan cada año de acuerdo con el Índice de Precios de Consumo (IPC). Lo que permite que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo frente al aumento del coste de la vida. El 2024 trajo una revalorización generalizada, pero en 2025 se añadirán nuevos cambios, especialmente para la pensión máxima.

Los tipos de pensión que más han subido hasta ahora han sido aquellos que afectan a las personas con menores ingresos. Por ejemplo, la pensión de viudedad con cargas familiares ha aumentado un 14%, ya que el 95% de quienes reciben esta prestación son mujeres. El objetivo del Gobierno es reducir la brecha de género en las pensiones, y este tipo de subida lo refleja claramente.

Prioridades en la revalorización de las pensiones

El sistema español prioriza ciertos tipos de pensión a la hora de aplicar las subidas. Las pensiones no contributivas de jubilación y de invalidez, por ejemplo, han recibido un aumento del 6,9% en 2024.

Ello se debe a que son las más bajas y no dependen de las contribuciones laborales de los beneficiarios. Este ajuste también se aplicó al Ingreso Mínimo Vital, que busca cubrir las necesidades básicas de las personas con menos recursos.

Por otro lado, las pensiones contributivas, aquellas que dependen de los años cotizados y las aportaciones realizadas, han tenido un aumento más moderado. Apenas de un 3,8%. Este tipo de pensión es más común entre aquellos con una carrera laboral extensa y contribuciones altas.

El destope de la pensión máxima

Uno de los cambios más relevantes en la reforma de 2025 es el destope de la pensión máxima. Este ajuste permitirá que las pensiones más altas, que hasta ahora estaban limitadas a una cuantía específica, se revaloricen cada año en un 0,115%. Este incremento se aplicará de manera acumulativa hasta llegar al año 2050, momento en el que la pensión máxima habrá subido un 20%.

Actualmente, la pensión máxima es de 3.175 euros mensuales, distribuidos en 14 pagas. Aunque parece una cifra considerable, aquellos que están acostumbrados a un estilo de vida acorde con sus ingresos también sufren los efectos de la inflación. Este aumento responde a la necesidad de ajustar el sistema para que esas personas mantengan su nivel de vida.

El futuro de las pensiones en España estará marcado por la capacidad del sistema para adaptarse a los cambios económicos, sociales y demográficos. Estas reformas son solo el principio de un proceso que continuará en los próximos años. Especialmente con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del sistema y mejorar la calidad de vida de todos los pensionistas.