Aliaksandr Yarmashchuk, Mimagephotography Las dos fechas clave para los pensionistas que ha anunciado la Seguridad Social
La Seguridad Social ha marcado dos fechas clave para los pensionistas y para la subida de sus pensiones en 2025
La Seguridad Social ha marcado dos fechas clave para los pensionistas en 2025, lo que genera grandes expectativas sobre los aumentos que se aplicarán.
A partir del 1 de enero de 2025, los presupuestos generales del Estado incluirán el porcentaje de subida que afectará tanto a las pensiones contributivas como a las no contributivas. Estas incluyen las pensiones de jubilación, viudedad, incapacidad permanente, orfandad, pensiones a favor de familiares y las de Clases Pasivas, que afectan a funcionarios y personal militar retirado.
La Seguridad Social confirma dos fechas clave para los pensionistas
La primera fecha crucial es el 28 de noviembre de 2024. Ese día se publicará el IPC interanual, que mide la inflación media entre diciembre de 2023 y noviembre de 2024.
El IPC es un indicador clave, ya que será la base para calcular el porcentaje de subida de todas las pensiones. Este dato permitirá a los pensionistas tener una idea aproximada del aumento que recibirán en el próximo año.
La segunda fecha clave será el 13 de diciembre de 2024, cuando se confirmará oficialmente el porcentaje definitivo de la subida. Esta cifra afectará tanto a las pensiones contributivas como a las no contributivas, pero con un enfoque especial en las mínimas y no contributivas.
Estas últimas tendrán un incremento adicional que busca reducir la pobreza entre los pensionistas. Se espera que, para 2025, las pensiones mínimas se sitúen en el 60% de la renta media de una unidad familiar compuesta por dos adultos.
Este aumento forma parte de un plan progresivo que culminará en 2027. Para entonces, se espera que las pensiones mínimas y no contributivas alcancen el 75% del umbral de pobreza para hogares unipersonales. Esta estrategia busca proteger a los pensionistas con menos recursos y asegurar que no pierdan poder adquisitivo ante el aumento del coste de vida.
El impacto de estas medidas es considerable, sobre todo para los pensionistas más vulnerables. Para quienes reciben pensiones mínimas, este incremento podría representar una mejora significativa en su calidad de vida. Las estimaciones actuales prevén una subida del 3,06% para las pensiones contributivas, aunque este porcentaje dependerá de la inflación y de las decisiones del gobierno.
Estas fechas son clave para millones de pensionistas que esperan con interés conocer cómo sus prestaciones cambiarán en 2025. La subida busca evitar la pérdida de poder adquisitivo y reducir las desigualdades económicas entre quienes reciben las pensiones más bajas.
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