Alegría a muchos propietarios con la declaración de la Renta en 2025: lo dice Hacienda

Hacienda establece una serie de deducciones fiscales que permiten a los contribuyentes reducir el importe a pagar a la Agencia Tributaria por la Renta. Estas ventajas fiscales varían según diferentes factores, como la situación familiar, los ingresos o la inversión en ciertos inmuebles. Sin embargo, muchas personas desconocen que aún pueden beneficiarse de ciertas reducciones si cumplen con los requisitos establecidos.

Uno de los casos más importantes es el de la compra de la casa habitual con hipoteca. Aunque esta desgravación ha desaparecido para nuevas adquisiciones, quienes compraron su casa hace más de una década pueden seguir aplicando esta deducción. Conocer los detalles y cumplir con las condiciones necesarias puede traducirse en un ahorro significativo en la declaración.

Hacienda aplica deducción por compra con hipoteca antes del 2013

Si compraste casa y firmaste hipoteca antes del 2013, te puedes ahorrar todo este dinero en la Renta. Hacienda permite que quienes adquirieron su vivienda habitual antes del 1 de enero de 2013 puedan seguir aplicando la deducción por inversión en vivienda habitual. Esto significa que aún pueden desgravar un 15 % de las cantidades pagadas por la hipoteca, con un límite de 9.040 euros anuales.

Para beneficiarse de esta deducción, es imprescindible que el contribuyente haya aplicado esta ventaja fiscal en declaraciones anteriores. Si en algún año dejó de incluirla en su declaración, perdería el derecho a seguir aplicándola. Además, la vivienda debe seguir siendo la morada habitual y no haber sido vendida o alquilada a terceros.

Hacienda aclara cómo solicitar la deducción en la Renta

Para asegurarse de que la deducción se aplica, es fundamental revisar el borrador de la declaración y comprobar que los datos de la hipoteca aparezcan. Si no figuran automáticamente, el contribuyente debe incluirlos manualmente en el apartado correspondiente. Es recomendable tener a mano las escrituras de la vivienda y los justificantes de pago del préstamo por posibles requerimientos por parte de Hacienda.

Este descuento fiscal sigue vigente para quienes cumplen con los requisitos, permitiéndoles reducir el importe de su declaración. Revisar bien la información y asegurarse de aplicar la deducción correctamente puede marcar la diferencia entre pagar más impuestos o recibir una devolución en la Renta de 2025.