Higiene doméstica y salud: una correlación estrecha

Siempre suelen mencionarse la dieta y el ejercicio a la hora de mantener una buena salud, sin embargo, algo que puede pasar desapercibido, pero que tiene un impacto directo en nuestra calidad de vida, son las condiciones en las que tenemos nuestro hogar. Eliminar bien los restos de comida, limpiar bien el hogar, retirar el polvo y mantener un orden son aspectos fundamentales que mejorarán en gran medida tanto nuestra salud física como nuestra salud mental.
Los alérgenos, un problema que cada vez hay que combatir más
En ocasiones, debido a la desinformación sanitaria, mucha gente no sabe que uno de los mayores problemas de la falta de higiene, sin duda, se encuentra en los alérgenos. Estas sustancias que pueden incluir desde micropartículas de polvo, hasta ácaros, hongos y otros restos, pueden causar serias molestias en nuestra salud, sobre todo, si convivimos con personas alérgicas. Por ello, la limpieza diaria y, cada cierto tiempo, una limpieza en profundidad del hogar nos ayudará mucho con patologías como el asma o la dermatitis. Esto aplica también, además, a la hora de lavar la ropa, ya que es necesario no solo higienizar bien las prendas, sino secarlas bien para evitar la proliferación de hongos o bacterias que, además de causar mal olor, también pueden ser las culpables de ciertas afecciones en la piel.
Aun con todo esto, también es necesario advertir que no solo se trata de mantener nuestro hogar limpio, sino también ordenado. Está demostrado que una casa ordenada impacta de manera muy positiva en nuestra salud mental. El denominado ruido visual, provocado por el desorden principalmente, puede ocasionarnos estrés y, en casos más graves, depresión. Por lo tanto, es fundamental intentar mantener un orden en lo que nos rodea, con el fin de mantener una buena salud mental, que equilibre nuestro estado de ánimo, nos empuje a ser proactivos y nos ayude a sentirnos mejor.
Mantener libre el hogar de restos de comida, clave para evitar intoxicaciones
En muchas ocasiones, una buena rutina de higiene respecto a los restos de comida nos permitirá librarnos de diversos problemas de salud. Lavar bien los utensilios después de comer, no dejar restos de comida en los platos durante mucho tiempo y utilizar medidas para higienizar todos aquellos artículos que vayan o estén en contacto con la comida son acciones con las que conseguiremos librarnos de las temidas intoxicaciones. La proliferación de bacterias a temperatura ambiente puede darse de una manera muy rápida y el problema principal reside en que, en la mayoría de los casos, no nos daremos cuenta, puesto que no percibiremos un cambio de aspecto o de olor en la comida, a no ser que se encuentre en un estado avanzado.
De esta forma, siempre hay que tomar las precauciones necesarias para evitar accidentes y es muy importante limpiar bien lo que hayamos utilizado tanto para cocinar como para comer. Para ello, si no disponemos de un lavavajillas que lave a 65° para eliminar bacterias, siempre podemos optar por una última fase de fregado con lejía alimentaria.
En definitiva, las medidas que pongamos tanto para mantener nuestro hogar limpio y ordenado, como para evitar proliferación de bacterias o intoxicaciones serán claves para un aumento notable de nuestra calidad de vida.