Siete años sin Paloma Chamorro: 'Musa' televisiva e icono de la Movida Madrileña.

Su melena era un símbolo de Televisión Española y su innovador estilo afterpunk fue copiado por muchas de sus admiradoras. Este pasado mes de marzo, Televisión Española, la que fue su casa durante muchos años, estrenó el documental  'Icónica Chamorro', un proyecto que trataba en profundidad la figura de la periodista madrileña  Paloma Chamorro. Un mes antes, la cadena pública quiso homenajear la figura de la comunicadora y fue protagonista de una de las entregas del programa 'Imprescindibles'. 

Chamorro se consagró como todo un símbolo de la cultura de la década de los ochenta y por supuesto un icono de la ‘La Movida Madrileña’. Algunos la tacharon de comunicadora mediocre y tenía fama de "atrevida, de roja, de chica atípica". Para otros, era la diva de la modernidad. El 29 de enero de 2017 la cultura española se teñía de luto para despedir a una de las grandes (y transgresoras) comunicadoras de Televisión Española. La presentadora madrileña  fallecía a los 68 años víctima de un fallo cardíaco.

A principios de la década de los 2000 había optado por retirarse del mundo de la televisión y solo realizó apariciones esporádicas en la que fuera su casa, como el homenaje a la pintora Maruja Mallo o la conmemoración del 250º aniversario del nacimiento del pintor Francisco de Goya.

La 'musa televisiva' de la Movida

La periodista madrileña Paloma Chamorro es una de las mujeres que ha pasado a la historia de Televisión Española. La comunicadora se licenció en filosofía y poseía amplios conocimientos en ramas artísticas como la música, el arte o la literatura, un hecho que le valió para que a su entrada a la cadena pública presentara diversos programas de divulgación cultural.

La filósofa inició su carrera en la emisora pública cuando reinaba el blanco y negro así como la censura impuesta por el régimen franquista. Presentó programas como ‘Galería’, dirigido por el crítico de cine español Fernando Méndez-Leite, o  ‘Encuentros con las artes y las letras’, conducido por Carlos Vélez y en el que Chamorro compartía mesa de debate con rostros como el escritor Fernando Sánchez Dragó  o el periodista Jesús Torbado. A finales de la década estuvo al frente del espacio ‘Imágenes. Artes Visuales’ en el que entrevistó a diversas personalidades vinculadas al mundo de la pintura como Salvador Dalí  o Joan Miró.

Chamorro ya era un rostro televisivo conocido por la audiencia aunque alcanzó popularidad con ‘La Edad de Oro’, uno de los programas de carácter cultural más influyentes de la década de los ochenta. Era un formato vanguardista en el que la periodista hablaba sobre las últimas tendencias. La presentadora se coló en las televisiones de los españoles el 17 de mayo de 1983 en horario prime time y, a partir de ese momento, el programa conquistó a la juventud española. Si en los míticos locales de Madrid como Rock Ola, La Bobia o El Penta se congregaban personajes de la moda, la música o el cine, Chamorro conseguía que se prestaran a intervenir en su programa.

A día de hoy sería prácticamente imposible pero la madrileña logró que artistas internacionales de la talla de Lou Reed, John Cale, Karma ChameleonEcho & Bunnymen,The Cars o The Smiths  actuaran en directo. Por supuesto, los ‘referentes musicales’ de ‘La Movida’ como Kaka de Luxe,  Siniestro Total, Loquillo,Alaska y Dinarama,  Gabinete Caligari o Derribos Arias  también quisieron participar de aquel fenómeno televisivo.

Además de la música, el diseñador Francis Montesinos, el escritor Jesús Ferreiro, el pintor e ilustrador Ceesepe, la fotógrafa Ouka Leele  e incluso el alcalde Enrique Tierno Galván se pusieron frente a que la que muchos conocían como la musa televisiva de la movida.

Un crucifijo y un proceso judicial

El programa que condujo la presentadora madrileña se mantuvo en la parrilla televisiva hasta el 2 de mayo de 1985. Paloma Chamorro se despidió con unas palabras que no dejaron indiferente  nadie. “ A quienes nos han atacado, nos han boicoteado, a quienes han hecho todo lo posible porque ‘La Edad de Oro’ dejara de existir, ellos han sido nuestro mejor estímulo”.

No hay que olvidar que a principios de la década de los ochenta aún había muchos nostálgicos que apostaban por el regreso de la dictadura y cualquier atisbo de desafío era denunciado.

La despedida que entonó Chamorro no fue casual, pues en 1984 el juez de instrucción de Móstoles admitió a trámite una querella presentada por el abogado Juan Riu  contra Televisión Española y la presentadora, a quienes acusaba de actos de profanación de los sentimientos religiosos.

Los hechos se remontaban al programa del 17 de octubre de 1984, donde se emitió un vídeo musical del grupo británico Moon Child  en el que aparecía la imagen de un  Cristo crucificado, cuya cabeza había sido sustituida por la de un cerdo, colocado en la parte superior de un ataúd. El demandante se sintió ofendido como miembro de la iglesia Católica y calificó de "desvergonzadas y soeces" algunas de las escenas emitidas y de  "imagen blasfema”.

La presentadora de Televisión Española fue juzgada el 25 de septiembre de 1990 en la Audiencia Provincial de Madrid y declaró que “había avisado de que el contenido podría herir la sensibilidad del público”. También afirmó que previamente a la difusión ella había visto el videoclip junto a sus jefes, el entonces director de programas de TVE Ramón Gómez Redondo  y el exdirector de la segunda cadena Enrique Nicanor.

Finalmente, el fiscal, que en conclusiones provisionales solicitaba una pena de un mes de arresto y 100.000 pesetas de multa por un delito de blasfemia, retiró la acusación. El fallo fue confirmado tres años después por el Tribunal Supremo. Los últimos años, la que fuera el 'altavoz de la Movida' se retiró de la vida pública tras sufrir varios problemas de salud.