Palito Dominguín, la 'sobrinísima' del clan Bosé que rompe corazones

En la saga de los Dominguín-Bosé confluyen el refinamiento italiano, la tradición torera y el arte. Un legado que ha recogido la nueva generación del clan que un día iniciaron el torero Luis Miguel Dominguín y la actriz Lucía Bosé. 

Una de los miembros de esta nueva generación es Lucía Tristancho Dominguín, por cuyas venas corre el arte. Es hija de la empresaria Lucía Dominguín y el productor Carlos Tristancho. La joven fotógrafa, de 28 años, se cambió el apellido porque "Dominguín vende más y Bosé ya lo escogió su tío Miguel". 

Además de fotógrafa, modelo y pintora Palito también es figura televisiva, ya que ha participado en realities como Supervivientes o Masterchef Celebrity. Desde hace ocho años mantiene una relación con el británico Harry James, con quien convive en la finca familiar de Vilamarxant (Valencia). 

Junto a su familia, a quien está muy unida, pasó las últimas navidades en Gran Canaria antes de emprender un viaje a Nepal. Un viaje solidario que la joven realizó en soledad con el fin de seguir de cerca las labores de la ONG Dream Nepal, fundada por Marina Portabella y en la que ha colaborado como fotógrafa. 

Palito mantiene una excelente relación con el resto del clan y ha heredado las dotes artísticas que un día nacieron en su tío Miguel Bosé, pero ¿cuál es la historia de Palito Dominguín? 

La historia de Palito Dominguín, la 'sobrinísima' de Miguel Bosé

El arte corre por las venas de Lucía Tristancho Dominguín. Polifacética y creativa, es una apasionada de la expresión artística en todas sus formas posibles. Pero lo cierto es que Lucía ha pasado a ser conocida como Palito —ya que de pequeña siempre jugaba con un palito— y no ha utilizado el apellido paterno sino materno porque según sostiene, "vende mucho". 

Lucía Dominguín y Carlos Tristancho han tenido dos hijas: Palito Dominguín y Jara Tristancho. El año pasado Jara dio a luz a su primer hijo, Leonardo, el tercer nieto de Lucía Dominguín. Lucía, además, tuvo dos hijos de su anterior matrimonio con Alessandro Salvatore: Bimba y Olfo.

Tanto Palito como Jara nacieron en la provincia de Badajoz, donde crecieron en medio de la naturaleza, en una finca que adquirieron sus padres. Aunque en un principio fue un matrimonio estable, pronto se vería golpeado por la ruina económica. La pareja terminó por separarse, un duro golpe para Lucía y sus hijas. 

Aunque el golpe más duro al que se enfrentó Lucía Dominguín fue la muerte de su hija Bimba Bosé, fruto de su matrimonio con Alessandro Salvatore. Bimba falleció en enero de 2017 a los 41 años. La modelo llevaba luchando desde el año 2014 contra un cáncer de mamá que finalmente no logró superar.

La faceta televisiva de Palito Dominguín 

A diferencia de otros miembros de la saga, Palito ha dado el salto a la pequeña pantalla. Participó en una las ediciones del reality Supervivientes, donde protagonizó un tándem de lo más recordado con la también concursante Lola Mencía. 

También probó suerte al frente de los fogones en la última edición del programa Masterchef Celebrity, donde coincidió con figuras como Toñi Moreno, Blanca Romero, Álvaro Muñoz Escassi —hoy en el punto de mira por su ruptura con la modelo María José Suárez— o Jesulín de Ubrique.

Tal es el vínculo que forjaron que fue el diestro gaditano quien invitó a algunos compañeros del programa a pasar un fin de semana en la finca de su propiedad Ambiciones.

Pintora, modelo y su romance con Harry James

Hasta Ambiciones Palito no viajó sola, sino que lo hizo en compañía de su pareja, el británico Harry James, con quien mantiene una relación desde hace ocho años y con el que vive en la finca familiar de la localidad valenciana de Vilamarxant, donde también residen su madre, Lucía, y su tía, Paola Dominguín.

De su tía Paola ha heredado la pasión por la moda, habiendo trabajado, al igual que su primo Nicolás Coronado, como modelo. La fotógrafa se ha subido a la pasarela de la mano de Ángel Schlesser, Ágatha Ruiz de la Prada o Francis Montesinos.

Precisamente, en 2017 Palito cerró uno de los desfiles del modisto valenciano con un look negro en homenaje a su hermana Bimba, una de las modelos más queridas de nuestro país, fallecida en enero de aquel año.

Con su madre comparte la pasión por la naturaleza y la pintura. De hecho, lanzó una colección de arte digital llamada 'Walter Ego', que se agotó en tan solo unas horas.

Pero lo cierto es que la disciplina que ha conquistado a Palito es la fotografía, arte en el que se interesó desde pequeña. Porque como ha declarado, "siempre he tenido una cámara en la mano". Y es que por más que pasen los años, las nuevas generaciones de la saga Dominguín-Bosé siempre serán referentes en el mundo del arte.