El Cierre Digital Giro de 180º en la vida del torero 'Espartaco': Así es su nuevo negocio ganadero
El torero sevillano 'Espartaco' reinventa su legado con una ganadería de bravo y centra su vida en su finca 'Majavieja'
En el mundo taurino, el nombre de Juan Antonio Ruiz 'Espartaco' evoca recuerdos de faenas inolvidables. Y de un dominio indiscutible en las plazas más importantes de España.
Sin embargo, pocos imaginaban que, tras colgar el traje de luces, el maestro sevillano dedicaría su tiempo y esfuerzo a un sueño largamente acariciado: la ganadería de bravo.
Juan Antonio Ruiz 'Espartaco': De leyenda del toreo a embajador del campo bravo
Nacido en Espartinas, Sevilla, el 3 de octubre de 1962, Juan Antonio Ruiz 'Espartaco' creció bajo la influencia de su padre, Antonio Ruiz Rodríguez, quien también fue torero. Espartaco debutó con 12 años en la plaza de Camas y se retiró definitivamente en 2015 en La Maestranza.
Juan Antonio Ruiz construyó una carrera que lo llevó a convertirse en una leyenda viva del toreo. Líder del escalafón en ocho temporadas, con sus memorables actuaciones en plazas como La Maestranza de Sevilla o Las Ventas de Madrid. Estas faenas le consolidaron en la historia del toreo.
En 1982 su espléndida faena en La Maestranza le permitió salir a hombros por primera vez. En 1985 salió por la puerta del Príncipe por segunda vez, tras una memorable tarde en la que lidiaba toros de Manolo González.
Su dominio del ruedo y su prodigiosa técnica de lidia lo posicionaron como una figura indiscutible, especialmente en la suerte suprema.
El nacimiento de un proyecto ganadero
Tras su retirada, Juan Antonio Ruiz adquirió la finca Majavieja en Constantina, Sevilla, que se convertiría en el epicentro de su nueva aventura. Posteriormente, amplió sus terrenos con Cerroporras, donde pastan parte de sus reses.
Su proyecto ganadero se sustenta en una cuidadosa selección genética basada en encastes Núñez, Torrestrella y Guateles, buscando preservar la bravura y el temple característicos de estas líneas.
“La ganadería tiene su origen en la sangre Núñez, pero con cruces selectivos de Torrestrella y Guateles. Tengo un gran número de vacas y erales, y quiero seguir mejorando cada año”, comentó Espartaco, que supervisa personalmente cada detalle del proceso.
La finca Majavieja es ahora un referente dentro de la ganadería española, con una excelente reputación por su crianza de reses bravas.
Mentoría y legado
Paralelamente, ha mantenido su vínculo con el mundo del toreo, actuando como mentor para jóvenes promesas. En especial, ha apoyado a los hermanos Jiménez, Javier y Borja. Ambos toreros sevillanos que se han enfrentado a as dificultades de abrirse camino en un escalafón cada vez más reducido.
“Siempre les he dicho que el toreo es un camino de constancia y superación. Yo también pasé por momentos complicados al inicio de mi carrera, y es importante tener a alguien que te apoye”, reflexiona el maestro.
Ambos hermanos han logrado destacar en los últimos años, siendo Borja Jiménez uno de los nombres más prometedores del circuito actual gracias a una temporada llena de triunfos en 2024.
Reconocimientos y medallas
A lo largo de su carrera, Juan Antonio Ruiz cosechó innumerables éxitos y distinciones. En 1994, tras sufrir una lesión de rodilla en un partido de fútbol benéfico, tuvo que alejarse de los ruedos durante cinco años.
Sin embargo, regresó en 1999 y continuó demostrando su clase con faenas memorables. Como la que protagonizó con el toro Medilonillo, al que indultó en Alicante.
En 2003, Juan Antonio Ruiz fue galardonado con la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes. En 2022 recibió la Medalla de Andalucía, un reconocimiento a su trayectoria tanto en el toreo como en su faceta ganadera.
El futuro: tradición y evolución
El legado de Espartaco trasciende las barreras del tiempo y se reinventa con cada paso. Su ganadería, sus enseñanzas y su pasión por el toro bravo no solo honran su trayectoria como torero. Además, aseguran la continuidad de una tradición que forma parte del patrimonio cultural español.
En las dehesas de Majavieja y Cerroporras, bajo el sol andaluz, pastan los frutos de un sueño hecho realidad. Allí, Espartaco sigue escribiendo su historia, esta vez como guardián de la bravura y el espíritu del toro.
El legado familiar: el hijo de Espartaco
Juan Ruiz de Rato, hijo menor de Juan Antonio Ruiz y la socialitéPatricia Rato, representa una nueva generación de la familia. Sin seguir el camino taurino de su padre, cuenta con una profunda conexión con la tradición.
Nacido el 26 de noviembre de 2001 en Madrid, Juan se crio en la finca Majavieja, rodeado del mundo taurino. Sin embargo, su vocación lo llevó por otro sendero.
A los 23 años Juan acaba de finalizar sus estudios de Farmacia en la Universidad de Navarra, aunque su pasión por el toro sigue viva. Pese a no haberse decidido a vestir de luces, ha mostrado su interés por la tauromaquia participando en programas como Generación T. Un espacio de debate sobre la tauromaquia dirigido a los jóvenes.
También se le ha visto asistiendo a importantes plazas y disfrutando de actividades como capeas en la finca familiar.
Ha demostrado un carácter discreto y una vida privada alejada de la exposición mediática, enfocándose en su carrera profesional y su vida personal, que comparte con su novia Elena Ostos.
Juan Ruiz de Rato, aunque alejado profesionalmente del toreo, disfruta de la tradición familiar. Se convierte en un puente entre las nuevas generaciones y la cultura taurina, siempre con la admiración y el respeto hacia su padre, el legendario Espartaco.
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