Una exposición rinde homenaje al acuarelista Ángel Galán, el “pintor de los cielos”

El martes 1 de febrero se inaugurará la Exposición Homenaje al Pintor Angel Galán  en dos salas de exposiciones de la Casa Cantabria de Madrid, la Gutiérrez Solana (hall) y la María Blanchard (primera planta). El Maestro acuarelista consiguió que los críticos y entendidos en el arte de la época se rindieran a sus pies (Roberto Iglesias, Antonio Corral Castanedo, Edgar Degas, A. Cobos, Javier Rubio o Joaquín de la Riva “Hedilla”).

Ángel Galán es considerado  maestro de la acuarela por su intención innovadora de introducir nuevas técnicas  y por la gran cantidad de obras suyas que hay en todo el mundo. El acuarelista jienense nació en 1911 y se calcula que expuso cerca de 2.000 obras a lo largo de su vida.  "Pintó todo tipo de pinturas; acuarelas, lápiz, óleo... Le gustaba mostrar en sus obras la vida de los campesinos, el mar, el cielo y también la vida en la capital, Madrid, donde vivió gran parte de su vida", añade Ángel Galán, hijo del acuarelista.

En su época de estudios escolares comienza su afición por el dibujo y más tarde, en el año 1929, sus buenas aptitudes para el mismo hacen que ingrese en la Escuela Nacional de Cerámica de Madrid, centro de gran prestigio en la época, donde cursó todas las especialidades, destacando en la pintura, especialmente en la acuarela.

En 1930 expone por primera vez en la Exposición colectiva en el Círculo de Bellas Artes, aportando algunas de sus obras en otras exposiciones colectivas posteriores, tanto nacionales como internacionales.

En el año 1935 es galardonado con el premio Nacional por la revista Blanco y Negro, siendo publicadas algunas de sus acuarelas en dicha publicación.

En el año 1940 oposita a profesor de pintura en la Escuela Nacional de Cerámica, donde desempeña dicho cargo hasta su jubilación. Mucho más tarde, en 1974, es cuando decide exponer sus obras al público, de manera individual, en una Galería de Arte en Madrid, realizando numerosas exposiciones a partir de esta y hasta el año 1993 por toda la geografía española.

La pérdida de vista a causa de un glaucoma hizo que no pudiera seguir exponiendo en sus últimos años de vida aunque hasta el final, en 1998, siguió pintando y dibujando. Al principio, pintaba colores más nítidos y menos fuertes y con el paso del años, Galán cambió la forma de pintar, añadiendo colores más vivos a sus obras. Esta es una de las características más representativas del pintor.