Reanudará sus sesiones el próximo 17 de septiembre de la mano de la cadena de exhibición mk2, que apuesta por las salas urbanas
El histórico Cine Paz abrirá de nuevo sus puertas en Madrid después de un año sin actividad

El Cine Paz, la mítica sala con cinco pantallas en la madrileña calle de Fuencarral, y situado entre las glorietas de Quevedo y Bilbao, abrirá sus puertas de nuevo el próximo viernes. En activo desde 1943 y propiedad de la familia Góngora desde 1978, ahora contará con “una alianza estratégica” con mk2, que cuenta en España con 125 pantallas en 10 complejos situados en cuatro comunidades autónomas.
En España, según datos de abril de 2019, había un total de 3.593 pantallas pertenecientes a unos 500 complejos cinematográficos. Sin embargo, la pandemia, el alto precio de la electricidad y la guerra entre las plataformas digitales han golpeado muy fuerte a este sector. Cuando se acabó el confinamiento, el Paz fue de los primeros en reanudar las proyecciones. Abrió el 26 de junio y cerró nuevamente el 30 de septiembre, llevando de esta forma casi un año sin actividad.
El público de este cine es un referente en la industria. En muchas ocasiones se preguntaba: ¿les gustará a las señoras del Paz? Refiriéndose así a su grupo mayoritario de espectadores: mujeres ilustradas, de más de 50 años, público fiel a un tipo de cine independiente en versión doblada. “Recibimos muchos mensajes digitales de nuestros espectadores, porque no proceden solo del barrio. Nos llaman y nos echan de menos desde El Escorial, Las Rozas... Están esperando que su Paz abra” cuenta Góngora, que da cifras económicas de la crisis del coronavirus: “Durante el confinamiento, perdimos más de 1.000 euros diarios. Multiplica eso por 100 días. Cuando abrimos en verano de 2000 tuvimos un 70% de pérdidas en la taquilla. Hemos acabado con nuestras reservas. Y estas semanas aún vemos cómo la taquilla no recupera brío”. Sin embargo, el pasado fin de semana los resultados mejoraron, gracias a los estrenos de Shang-chi y la leyenda de los 10 anillos; After. Almas perdidas y Maligno, las 20 películas con más público sumaron una recaudación de 4,5 millones de euros, “aunque esa cantidad solo es el 58% del mismo fin de semana de 2019″.

Interior Cine Paz.
El cine Paz entra así en el circuito de mk2. Sus cinco salas seguirán igual (la más pequeña con 99 butacas y la mayor con 333). “Nosotros le damos un nuevo impulso al Paz, de la mano de la familia Góngora, que quiere que su sala siga existiendo”, comenta Álvaro Postigo, director general de mk2 en España recordando que justo al lado del Paz estaban los dos Roxy y enfrente el Proyecciones, el Bilbao y los Minicines. Hoy ya solo queda el Proyecciones, convertido en un complejo cinematográfico de la cadena Cinesa. “Unimos fuerzas porque ahora mismo se abre una ventana de ilusión” remata.
Mk2 no es precisamente una empresa recién llegada. Su fundador el francés Marin Karmitz, de 83 años, fundó mk2 como productora en 1967; después, como distribuidora, y, desde 1974, como empresa de exhibición. Como pocas salas proyectaban las peliculas que mk2 producía, Karmitz decidió hacerlo él mismo. Como productor, ha levantado más de 100 películas de cineastas como Krzystof Kieslowski, Claude Chabrol, Jean-Luc Godard, Alain Resnais, Louis Malle, los hermanos Taviani, entre muchos otros. Además, en Madrid poseen los cines Palacio de Hielo. Postigo confiesa que para ellos “debido al perfil de nuestra empresa, tener un cine en el centro de la ciudad es una ilusión añadida”. Porque la cadena de exhibición apuesta por esas salas, las urbanas, que no pasan por su mejor momento en España.
Cambios en la programación
Se darán algunos cambios en la programación con el fin de atraer a un público nuevo, pero sin perder su esencia, ni a su clientela de toda la vida. Para ello, en unos cines especializados en cine de autor en versión doblada, añaden sesiones matinales diarias, las de fin de semana aumentarán los filmes para audiencia infantil, a partir de las 19.30 habrá proyecciones en versión original subtitulada en todas las salas, reservando las dos primeras sesiones para el público fiel del Paz. Los Góngora apostaron siempre por proyecciones de conciertos de música clásica, óperas o espectáculos de ballet, y en mk2 comparten esa política: “Es uno de los cines de Madrid que más contenidos alternativos maneja y eso nos apasiona; añadiremos eventos para público joven urbano”, explica Postigo.
Según Carolina Góngora, “esta alianza es una obligación autoimpuesta, y tras más de cuatro décadas dedicados al cine, queremos que este local se mantenga como sala cinematográfica. Y con mk2 el Paz tendrá más vida de la que los Góngora podríamos darle solos”. Cuando abran el viernes 17, el público podrá ver Dune de Denis Villeneuve; la italiana Lazos, de Daniele Luchetti y algún estreno de la semana anterior, de forma que puedan acudir todos los públicos.