29 de marzo de 2024
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FIN DE SEMANA

El arista granadino murió el 19 diciembre de 2000 tras haber desarrollado una sobresaliente carrera plagada de éxitos musicales

Veinte años sin Carlos Cano: Cómo se hizo grande el cantautor y mito que renovó la copla andaluza

/ Carlos Cano
Se acaban de cumplir veinte años de la muerte de Carlos Cano. Este cantautor andaluz reinventó la copla y desarrolló una extraordinaria carrera que le granjeó multitud de éxitos. Con su muerte se marchó un mito que todavía perdura en la memoria de sus numerosos fans.

Anteayer se cumplieron veinte años de la muerte de Carlos Cano. Este artista andaluz rompió muchas barreras con sus composiciones y se convirtió en una estrella de la copla. 

Un poeta con mayúsculas

Carlos Cano era cantautor y poeta andaluz. Un músico que recuperó palos tradicionales andaluces relativamente olvidados y denostados como el trovo popular, las murgas, los tanguillos y muy especialmente la copla andaluza, género que renovó y llevó a lo más alto con la creación de clásicos como 'María la portuguesa' o las 'Habaneras de Cádiz'.

Su perfeccionismo y versatilidad como compositor le permitió componer tangos, boleros, cuecas, tanguillos, rumbas, sambas, nanas, murgas carnavaleras o temas intimistas acompañado por tan sólo su voz y su guitarra.

Carlos Cano fue un compositor muy prolífico; un músico destacado dentro del panorama iberoamericano que defendió siempre con ternura -y una sensibilidad extraordinaria- la carga irónica y emocional de sus textos y canciones a lo largo de su carrera:

Verde, blanca y verde, El Salustiano, La morralla, Habaneras de Cádiz, Con permiso, La murga de los currelantes, Casida del rey chico, El rey Al Mutamid dice adiós a Sevilla, Andalucía Superstar, La estrella perdida, La metamorfosis, Tango de las madres locas, Romance a Ocaña, La murga de Emilio el Moro, Romance a Ocaña, Chiclanera, Habaneras de Sevilla, Alacena de las monjas, Habanera imposible, Dormido entre rosas, Luna de abril, La bien pagá, Un vaso de té verde, La reina del blues, Que desespero…

Infancia

Carlos Cano nació en el barrio del Realejo de Granada, en la Cuesta del Maurón, el 28 de enero de 1946. Era el mayor de tres hermanos: María José (1947) y Javier (1963).

Su abuelo, Emilio Fernández Adarve, fue maestro químico con rango de capitán en la fábrica de pólvoras de El Fargue y fue fusilado durante el golpe de estado fascista el 15 de octubre de 1936. El general Queipo de Llano firmó la pena de muerte semanas antes de un juicio que fue una pantomima.

Carlos Cano.

Emilio fue asesinado junto a su primo y otras siete personas frente a la tapia del cementerio de San José, y tras el crimen, los falangistas impusieron un ultimátum de veinticuatro horas a su viuda para abandonar el pueblo, a cinco kilómetros de la capital nazarí.

Juventud


Ante la falta de oportunidades, como otros tantos miles de españoles, Carlos Cano emigró a Suiza, Holanda y Alemania. Allí realizó infinidad de trabajos, desde pinchadiscos en un hotel a operario de farolillos para una funeraria o en la imprenta del semanario alemán Der Spiegel. Reflejó estas experiencias vividas como migrante en sus conocidos temas 'La miseria' o 'El Salustiano'. 

Adiós

El 28 de noviembre de 2000 se le reproduce el aneurisma de aorta ya sufrido 5 años antes, cuando iba a despegar el avión que le iba a llevar a Madrid. Una ambulancia lo traslada al Hospital Universitario San Cecilio donde es ingresado e intervenido de urgencia durante más de siete horas por el equipo médico del cirujano cardiovascular Eduardo Ros.

Tras tres largas semanas, cuando parecía que se estaba recuperando, sufre una nueva rotura de la aorta que no pudo superar. Carlos Cano falleció en Granada, su ciudad natal, el 19 de diciembre a las 5:30h. Veinte años después sus fans no le olvidan.

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