Borja Prado, el hijo del íntimo amigo del Rey Juan Carlos, escondido tras el dinero de la Superliga de Florentino Pérez

La noticia de la creación de la Superliga Europea dinamitó hace unos días el mundo del deporte. Doce de los clubes de fútbol más importantes de Europa anunciaban una nueva competición gobernada por sus clubes fundadores, con Florentino Pérez a la cabeza y el apoyo de bancos y vehículos de inversión como JP Morgan.

Pero estos no son los únicos responsables. Detrás del este pulso a la UEFA también está Key Capital Partners, firma que ha acompañado al Real Madrid en todas las iniciativas de crecimiento que ha afrontado con Florentino Pérez en los últimos tiempos. De hecho, Key Capital se embarcó con el club blanco en la financiación de la reforma del Santiago Bernabéu y también ha asesorado a Florentino en otros movimientos empresariales como el proceso de Abertis. Un vínculo evidente que no es en absoluto casual, y es que el tercer accionista de la firma financiera es Borja Prado, amigo personal y consejero de Florentino. En el mismo fondo Prado es socio de Anas Laghari, marroquí-francés de 37 años, y de Alex Matitia, presidente del mismo fondo. Entre los tres manejan el fondo, porque son los accionistas mayoritarios y Florentino Pérez es uno de sus mejores clientes. Su primera intervención fue gestionar la retirada de Iberdrola de Pérez tras perder su pelea contra Ignacio Sánchez Galán.

Borja Prado Eulate es hijo de otro nombre omnipresente en la reciente historia de España: Manuel Prado y Colón de Carvajal, diplomático y empresario mucho más conocido por su faceta de administrador privado de Juan Carlos I. Su madre, Paloma Eulate y Aznar, es marquesa de Zuya.

Borja Prado recibido por Don Juan Carlos I en una audiencia.

Casado desde 1990 con la jerezana Pilar Benítez Toledano, su boda se celebró en "El Toñanejo", una dehesa situada en la localidad gaditana de Medina Sidonia, donde crían parte de Torrealta, la ganadería que compró la familia Prado en 1979 y a la que Borja, que tiene palco en la plaza de toros de la Maestranza, ha cuidado con esmero. A aquel enlace acudieron las familias de alta cuna de la zona empezando por los Domecq, celebridades como Ana Obregón y banqueros como Mario Conde.

Prado se considera un hombre católico practicante, de hecho, estudió en el colegio Retamar, centro del Opus Dei. También pasó por Los Rosales, donde estudió el rey Felipe VI, aunque no coincidieron. No obstante, su relación con la Familia Real es estrecha, llegando incluso a ser socio de Micos, la guardería de la Infanta Elena.

No fue esa su única andadura en el ámbito empresarial. Su extensa red de contactos lo lanzó al mundo de los negocios de la mano de la UBS, una de las entidades bancarias más opacas e importantes de Suiza. También trabajó para Lazard, una empresa de asesoría financiera y gestión de activos, y Rothschild, un banco multinacional de inversión. 

Asimismo, Prado Eulate ejerció como consejero dominical en Mediaset. Fue precisamente durante su etapa en Italia, como director de Mediobanca, una entidad fundada por empresarios italianos tras la II Guerra Mundial con el propósito de reconstruir el país cuando, gracias a los vínculos de su banco con Enel, se produjo la entrada de la eléctrica italiana en Endesa, empresa por la que Prado también ha pasado. Borja Prado fue presidente de Endesa de 2010 a 2019. En ese último año, cobró 14,78 millones de euros, de los que 9,61 millones correspondían a la indemnización por su salida. Después de salir de Endesa, Prado compró el 14,99% de la firma de Key Capital Partners a su presidente y cofundador, Alex Matitia.

Ahora el empresario trabaja desde Key Capital en la construcción de la Superliga Europea y asesora a ACS, la constructora del presidente del Real Madrid, que en la actualidad trata de cerrar una operación valorada en 10.000 millones de euros para hacerse con el control de la mayor concesionaria de autopistas de Italia, Autostrade per l'Italia (ASPI).