La rumbera conocida como 'la Pipa' tiene 73 años y disfruta de la vida y de su nieta después de una vida de éxitos, dolor y enfermedad
María Jiménez: Ahora alejada del foco mediático y comprometida contra el maltrato a la mujer

Quién no recuerda las míticas canciones de la cantante sevillana María Jiménez Se acabó o La lista de la compra. Corrían los años ochenta cuando Jiménez nos conquistó con sus canciones. Artista de raza y de lengua irreverente, también fue conocida por su matrimonio con el actor Pepe Sancho y su mala salud.
La cantante nació en el barrio de Triana, en Sevilla, el 3 de febrero de 1950. Su padre, de ascendencia calé, era oriundo de Nerva, Huelva, y su madre de El Pedroso, Sevilla. Sus padres engendraron a dos hijas. María le lleva cinco años a su hermana pequeña, Isabel.
Su infancia estuvo marcada por la necesidad, vivía en un piso tan pequeño que el baño se encontraba en un pasillo compartido por todos los vecinos. Al caer enfermo su padre tuvo que emplearse envolviendo mantecados, limpiando platos o cuidando los hijos de los demás.
Cuando cumplió 15 años se trasladó a Barcelona para trabajar como criada para una familia de alta burguesía. Dos años más tarde regresó a Sevilla para trabajar en algunos tablaos de la ciudad compartiendo cartel con Lola Flores o Farruco. Se hizo conocida por el contenido liberal de sus canciones y de sus letras.
Dos matrimonios y dos hijos
Hace veinte años que la cantante dejó la capital para residir en la ciudad gaditana de Chiclana de la Frontera. A sus 73 años disfruta de la vida y de su nieta. Se encuentra apartada de los ruidos mediáticos. Solo se deja ver en los medios de comunicación en momentos muy puntuales, como la presentación de su biografía en la televisión publica o el día que dio a conocer su asociación benéfica.
María comenzó como artista en los tablaos flamencos, como el de Las Brujas, y fue apodada la Pipa al finalizar el franquismo.
El 1 de junio de 1980 contrajo matrimonio en la iglesia de Santa Ana, Sevilla, con el actor valenciano Pepe Sancho, con quien se casó dos veces. Con la segunda boda, la cantante pasó por una etapa difícil con el actor.

Boda de María Jiménez y Pepe Sancho en 1980.
Tuvo dos hijos en su vida, pero su felicidad no fue eterna. Su primera hija, María del Rocío Asunción Jiménez, nació en 1968, cuando María Jiménez tenía tan solo 18 años. En los mentideros de la época se decía que esta hija fue fruto de la relación de María con un miembro de una conocida familia hispalense.
Por desgracia, la joven falleció en un accidente de tráfico con tan solo 16 años la madrugada del 7 de enero de 1985. Sus restos descansan en el cementerio municipal de Boadilla del Monte en Madrid. Aquel golpe sumió a María Jiménez en una profunda desesperación. Ella se alejó de las cámaras y se volcó más que nunca en su familia.
Tres años después de su primera boda, en 1980, nació su hijo Alejandro, que llegó al mundo el 16 de febrero de 1983, fruto de su relación con Sancho. Fue un parto complicado, pero la cantante demostró una vez más que era una mujer fuerte capaz de sobrevivir a todos los golpes que le diese la vida.
Por un tiempo la familia fue feliz, pero María y Pepe Sancho rompieron al año de dar a luz a Alejandro. Fue una relación con muchas idas y venidas. Todo parecía que iba sobre ruedas, pero en lo sentimental vivió un calvario con insultos, humillaciones e infidelidades.
Tras la ultima separación con la cantante, Pepe Sancho se volvió a casar con la periodista Reyes Monforte. Este tercer matrimonio para Sancho duró desde 2006 hasta el fallecimiento del actor en 2013 por un cáncer de pulmón. Su cuerpo fue incinerado y sus cenizas esparcidas en Altea, Alicante.
La música de María Jiménez
La música de la cantante puede decirse que tiene dos etapas. María Jiménez publicó su primer disco en 1976, con la producción de Gonzalo García-Pelayo y con arreglos del guitarrista Paco Cepero. El disco estaba compuesto por rumbas, tangos, bulerías, boleros, rancheras y baladas compuestas por Silvio Rodríguez, Lolita de la Colina o Amancio Prada.
En 1978 lanzó el segundo álbum Se acabó, cuyo primer single se convirtió en un éxito total en España y México gracias a una letra desenfadada que visibilizaba a una mujer harta de una situación de maltrato. Durante los años ochenta siguió grabando y lanzando álbumes a un ritmo frenético (un álbum cada dos años), que la posicionaron en la escena nacional e internacional como una de las rumberas más destacadas.
Su carrera se relanza en 2002 cuando lanzó el disco Donde más duele, que versiona las canciones de Joaquín Sabina con la producción de Gonzalo García-Pelayo. Este disco fue un rotundo éxito y vendió más de 600.000 copias en España y de él se desprendieron los singles 'Con dos camas vacías' y 'El diario no hablaba de ti', con el grupo Estopa. También colaboró en 2001 en la canción 'La lista de la compra' con el grupo La cabra mecánica que consiguió llegar a lo más alto de la lista de Los 40 Principales.
Durante ese década presentó el programa Bienaventurados, en Canal Sur Televisión. Desde septiembre de 2009 hasta marzo de 2010 fue jurado en el programa 'Se llama copla' de la misma cadena, y después lo sería esporádicamente en su edición especial, Se llama copla: El desafío.
En 2002 publicó sus memorias Calla canalla. En el libro descubrió que su exmarido había tenido un hijo en 1973, llamado Javier, con una ex azafata del programa Un, dos , tres… responda otra vez llamada Pilar Pérez Sanabria.
La cantante también ha participado en varias películas y series de televisión como Todos los hombres sois iguales.
Tres años más tarde lanzó el álbum Canta José Alfredo Jiménez, con versiones de las más conocidas canciones de Jiménez. En 2013 hizo un dúo con Manuel Orta y en 2019 uno con Miguel Poveda. En 2020 publicó el álbum La vida a mi manera.
A lo largo de su carrera profesional ha recibido numerosos galardones. En 2018 recibió el premio Radiolé de la cadena de emisoras del Grupo PRISA a toda su trayectoria. En 2021 recibió asimismo el premio Andalucía Excelente.
Icono contra el maltrato
La cantante sabe muy bien lo que es tener problemas de salud. En febrero de 2013, a los 63 años, fue diagnosticada de cáncer de mama en estado primario. Fue operada en junio de ese mismo año para extirparle un tumor y empezó un tratamiento de quimioterapia y radioterapia. Tras tres años de lucha, anunció que estaba totalmente curada.
En 2019 fue ingresada de urgencia en el Hospital San Rafael de Cádiz para ser operada por un problema en el aparato digestivo del que se recuperó rápidamente.
Por otra parte, la artista se ha convertido en un icono contra el maltrato. En noviembre del año pasado presentó su fundación a favor de la lucha contra la violencia de género, mostrando públicamente su propia experiencia personal con el fin de visibilizar esta lacra social.
La Fundación María Jiménez quiere ofrecer un espacio de refugio y amparo para mujeres que sufren este tipo de violencia. Los objetivos se centran en ayudar a mujeres víctimas de violencia de género y al colectivo LGTBI además de becar y ayudar a nuevos talentos artísticos.