El fundador de Jotsa tenía 96 años y esta pérdida se suma a las sufridas en los últimos tiempos por la actriz: el fallecimiento de su hijo y su madre
Muere Antonio García, padre de Ana Obregón: Un constructor en manos de los Ruiz Mateos
Ana García Obregón ha vuelto a vivir un revés en su vida. La popular actriz ha perdido a su padre el empresario Antonio García de 96 años. En los últimos meses la presentadora madrileña ha estado especialmente ocupada en atender la salud del empresario. Este fallecimiento llega más de dos años después de la pérdida de Álex Lequio, hijo de la artista madrileña y Alessandro Lequio, víctima de un cáncer en mayo de 2020 y de la muerte de su madre Ana María Obregón el año pasado.
"Has vivido 96 años, difíciles en tu infancia cuando tuviste que empezar a trabajar durante la guerra cuando apenas eras un niño de 12 años limpiando pocilgas, pero con tu pasión y tu trabajo incansable durante 70 años conseguiste crear una gran empresa. Por eso recibiste una merecida 'Medalla al mérito del trabajo'. He coleccionado millones de momentos únicos contigo que guardo tatuados en mi corazón y que ahora utilizaré para poder seguir respirando porque en dos años me habéis dejado huérfana de padres y de hijo. Ahora las tres personas que más quiero en mi vida no estáis aquí conmigo y te juro, papá, que no sé cómo lo voy a hacer. Es un privilegio y un gran honor ser tu hija. Gracias papá por tanto. Te quiero infinito. Por favor, cuida mucho de mi hijo hasta que llegue. Eternamente juntos", ha escrito la artista en su Instagram para anunciar el fallecimiento de su padre.
Antonio García se hizo popular a raíz del salto al mundo del espectáculo de su hija Ana, pero más allá de esto era un empresario importante en el sector de la construcción. Nació el 18 de febrero de 1926 y empezó a trabajar con tan sólo 12 años. El 7 de mayo de 1957 creó la empresa constructora Jotsa con la que haría una gran fortuna. En los años del desarrollismo económico, García Fernández se convirtió en uno de los empresarios más importantes del sector 'del ladrillo'.
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Ana María Obregón y Antonio García se casaron a principios de los cincuenta y tuvieron cinco hijos y once nietos. Los cinco descencientes del matrimonio (Celia, Juan Antonio, Javier, Ana y Amalia) acabaron formando parte del holding familiar, Juan Obregón Toledo SA, y por lo tanto de Jotsa.
A principios de los 90 el 50% de las acciones fueron adquiridad por la empresa alemana Philipp Holzmann que, paulatinamente, se fue haciendo con más poder en la empresa hasta que a finales de la década, en 1999, apareció en los medios de información económica que Jotsa había solcitado al Juzgado de Primera Instancnia número 4 de Madrid habái solicitado la suspensió de pagos. Para entonces los García Obregón no tenían el control de Jotsa y los empleados afirmaron mediante un comunicado que Antonio García había guardo una previsión de 150 millones de pesetas en caso de tener que producirse un ERE. La empresa alemana lo negó y acabarían en un gran enfrentamiento con los representantes de los trabajadores.
Finalmente, la empresa acabaría en manos de otra saga tan mediática como los García Obregón, los Ruiz-Mateos. Los hijos del empresario jerezano se hicieron con Jotsa en el momento de expansión de Nueva Rumasa dentro de la política de comprar empresas con problemas económicos para reflotarlas a incorporarlas a su nuevo holding.
Desde ese momento, Juan García vivía retirado del mundo empresarial y tuvo siempre un perfil bajo a nivel mediático. De hecho, cuando su intimidad se vio violada al emitir un programa de televisión imágenes suyas sin ropa, la actriz acudió a los tribunales para garantizar la intimidad de su padre que no estaba vincualdo al mundo del espectáculo.
