
Nadie lo esperaba: Joaquín Climent da un giro a ‘La Promesa’ en el momento más tenso
Rómulo, el personaje interpretado por Joaquín Climent, sorprende a los fans de ‘La Promesa’ con su último movimiento
Este jueves, 26 de junio, los espectadores de La Promesa se van a quedar sin palabras con el inesperado giro que se va a producir durante su episodio número 623. Y es que Rómulo, personaje interpretado por Joaquín Climent, se va a ver obligado a intervenir para que la fiesta salga perfecta.
A pesar de ser uno de los personajes más queridos por los televidentes, los días del primer mayordomo dentro del palacio de los marqueses de Luján están llegando a su fin. Y es que, tras su reencuentro con Emilia, ha decidido jubilarse para disfrutar de su amor el tiempo que le queda.

Sin embargo, antes de abandonar para siempre La Promesa, Rómulo está trabajando muy duro para que la fiesta en honor a Catalina y Adriano salga según lo previsto.
Pero el regreso de Petra, y su reincorporación como ama de llaves, ha logrado revolucionar al servicio, poniendo en peligro el éxito de dicha celebración. No obstante, el mayordomo va a hacer todo lo posible para que esto no suceda.
Rómulo, personaje de Joaquín Climent, toma acción en la última fiesta que se va a celebrar en La Promesa
En el episodio de hoy de La Promesa, por fin se va a celebrar la esperada fiesta en honor de Catalina y Adriano, los recién nombrados condes de Campo y Luján. Una celebración en la que Rómulo va a desempeñar un papel fundamental.

Adriano se muestra nervioso ante el evento, aunque contará con la ayuda de Ricardo, que se va a encargar de darle los últimos retoques. Sin embargo, un inoportuno comentario de Lisandro lo descoloca aún más. Su incomodidad aumenta justo antes de la gran noche.
Mientras tanto, en la planta de servicio, Rómulo anima a su equipo para que la fiesta sea perfecta. Quiere despedirse de su carrera con dignidad y orgullo. No obstante, Petra sigue con su actitud hostil, mientras Teresa y Emilia intentan hacerla reflexionar.

Por otro lado, Manuel finalmente toma la decisión de leer la carta que le ha enviado su madre, pero opta por mentirle a su padre diciendo que nunca la abrió. Además, y aunque en un principio se niega a asistir a la fiesta, Alonso insiste y logra convencerlo.
Durante la fiesta, Adriano intenta mantener la compostura, pero no puede evitar cometer varios errores. Poco a poco, los presentes notan su nerviosismo y su actuación termina por delatarlo ante todos los asistentes.

Manuel, por su parte, se convierte en el centro de atención y muchas señoritas se le acercan durante la velada. Él hace todo lo posible por alejarse, pero una de ellas insiste demasiado. Esta joven, además, le revela una sorprendente información sobre su negocio.
Vera acepta ayudar a Lope a infiltrarse en su antigua casa y juntos buscan una coartada para su salida. Curro temía que Ángela fuera acosada por los amigos de Lorenzo en la fiesta, y así sucede. La joven termina enfrentándose con firmeza a uno de ellos.
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