
Kate Middleton rompe el silencio y ya no oculta qué sucede con el príncipe Guillermo
La princesa de Gales, Kate Middleton, estalla y cuenta toda la verdad durante su último viaje a Escocia
Kate Middleton ha regresado discretamente a la escena pública. Coincidiendo con su 14º aniversario de boda con el príncipe Guillermo, la princesa de Gales ha iniciado una visita especial a Escocia. Se trata del primer viaje en el que pernocta fuera de casa desde que se conoció su diagnóstico de cáncer, un gesto interpretado como una señal de fortaleza.
Una escapada con fuerte carga emocional
Escocia no es un destino cualquiera para los príncipes de Gales: fue en la Universidad de St. Andrews donde comenzó su historia de amor, y ahora han decidido conmemorar su aniversario en esa misma tierra. Durante dos días, permanecerán alojados en una casa rural en la isla de Mull, rodeados de naturaleza.

El itinerario comenzó por la tarde, con una parada en Tobermory, un encantador pueblo costero conocido por sus coloridas casas, donde fueron recibidos por los vecinos que salieron a saludarlos. En Aros Hall, centro comunitario apoyado por la Royal Foundation, la pareja recorrió un mercado artesanal y conversó con productores locales. Luego visitaron Croft 3, una granja y restaurante dedicado a prácticas sostenibles.
El anillo más simbólico reaparece
Uno de los detalles más comentados del viaje fue el retorno del famoso anillo de compromiso que perteneció a Lady Di. Esta joya, con un zafiro azul de Ceilán rodeado de diamantes, estuvo ausente del dedo de Kate desde que inició su tratamiento oncológico. En su lugar, había estado usando un anillo de zafiros de Cartier, lo que generó especulaciones sobre un posible cambio definitivo.
Sin embargo, con motivo del aniversario, la princesa volvió a lucir el anillo original, reafirmando su conexión emocional con la historia de la familia real. Junto al anillo, llevaba el reloj de Cartier que Guillermo le regaló en el pasado y dos collares con las iniciales de sus hijos: George, Charlotte y Louis. Las piezas, de la firma Daniella Draper, reflejan el apego de Kate a su rol como madre.

Estilo relajado para un día especial
La princesa optó por un look cómodo pero elegante. Eligió pantalones ajustados en tono marrón, combinados con una blazer de tweed cruzada de Holland Cooper. Como complemento, una camisa celeste con bolsillos frontales y unas botas planas de ante de See by Chloé en marrón chocolate.
Este regreso a la actividad institucional, aunque medido, representa un paso adelante en la recuperación de Kate Middleton. Su elección de fecha, lugar y símbolos personales no es casual. Es una forma de reafirmarse como figura pública, esposa, madre y futura reina, mientras retoma su agenda a su propio ritmo.
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