Fallece la princesa Ira Von Fürstenberg: Actriz, diseñadora e icono italiano

La princesa italiana Ira Von Fürstenberg ha fallecido a los 83 años de edad. Marbella se ha teñido de luto para despedir a uno de los iconos de la alta sociedad marbellí, como ya hizo con su primer marido, el príncipe Alfonso de Hohenlohe, quien falleció el 21 de diciembre de 2003.

Ira nació el 18 de abril de 1940 en la ciudad italiana de Roma y era hija del príncipe Tassilo von Fürstenberg y de Clara Agnelli, heredera de los 'Agnelli', una de las familias más influyentes de la nobleza italiana y los principales accionistas del imperio 'Fiat', que presidió su primo, Gianni Agnelli. También era prima del príncipe Juan Adán II de Liechtenstein.

Del cine al diseño de joyas

El hecho de pertenecer a una de las familias más influyentes de la nobleza italiana no moderó la personalidad de Ira: rebelde, inconformista e independiente. Entre las décadas de los sesenta y los ochenta, la aristócrata cumplió su deseo de ser actriz y tuvo la oportunidad de trabajar con cineastas de la talla de Franco Zeffirelli, compartir cartel con el actor Alfredo Landa o ponerse a las órdenes de Franco Nero. Entre algunos de sus títulos destacan 'The Vatican Affair o  'Plus beau que moi, tú meurs'.

Otra de sus grandes pasiones fue la moda y su belleza no pasó desapercibida para muchos de los 'referentes' de la época. Posó ante los fotógrafos Helmut Newton o Cecil Beaton, fue modelo para el diseñador Emilio Pucci, pertenecía al círculo íntimo de Karl Lagerfeld y tuvo la oportunidad de trabajar junto a la columnista especializada en moda Diana Vreeland. La pasión que sentía Ira por el mundo de la moda le llevó a que a principios de la década de los noventa lanzara su propia 'casa', a la que llamó Ira von Fürstenberg Collection, con una línea de ropa, accesorios, mobiliario, objetos de arte o joyas.

Del príncipe al playboy

En 1955, y con tan solo quince años, contrajo matrimonio con el príncipe Alfonso de Hohenlohe con quien tuvo a sus dos hijos, Kiko de Hohenlohe, que falleció en 2006 en una cárcel de Bangkok, donde cumplía condena tras haber manipulado su visado durante su estancia en el país asiático, y Hubertus de Honhelohe, cantante y esquiador profesional. Tanto Ira como Alfonso se convirtieron en los 'reyes' de la Marbella de entonces, a la que ella misma definió como "una fiesta salvaje", que comenzaba a despertar al turismo internacional. Su matrimonio duró cinco años, finalizando en 1960 a causa de una infidelidad por parte de la aristócrata.

Aquella deslealtad de la princesa se produjo con uno de los empresarios de éxito, considerado uno de los 'playboys del siglo XX', Francisco Pignatari, más conocido como Baby Piganatari. Su relación con el brasileño fue todo un escándalo en la sociedad.

Ella tenía 21 años y él 45 cuando pasaron por la vicaría en 1961. Pero a Ira las habladurías siempre le habían traído sin cuidado. Cierto es que a Baby le etiquetaban de playboy, cuando en realidad era un empresario de muchísimo éxito y mucho más rico que el príncipe de las noches locas de Marbella. Aquel matrimonio finalizó en 1964 y, desde entonces, a Ira se le han atribuido diversos romances, uno de ellos con el fallecido Rainero II de Mónaco, y otro con el empresario Roberto Federici, ex pareja de Carmen Martínez Bordiú. 

Su retiro en Roma

Con una vida digna de un argumento para una película, en 2020 se publicó su libro fotográfico Ira, vida y tiempos de una princesa, de Nicholas Foulkes, publicado por Harper Collins Ibérica. Un recorrido por la vida de la aristócrata que entabló amistad con personajes tan dispares como el pintor Salvador Dalí, el diseñador Valentino o el artista Andy Warhol.

De Puerto Banús, donde residió durante varias décadas, se trasladó a Madrid, fijando su residencia en el exclusivo barrio de los Austrias. Allí vivió hasta 2020, cuando decidió afincarse en Roma, su tierra natal. Y es que Ira von Fürstenberg es, además de actriz, modelo y princesa, una de las últimas supervivientes de aquella "Marbella salvaje", como ella la definía.