Aumenta la tensión en 'La Promesa' por culpa del gran problema de Joaquín Climent

Este viernes, 23 de mayo, La Promesa regresa a la parrilla de La 1 con el capítulo número 601. Entrega que, de seguro, logrará aumentar la tensión de todos los espectadores por culpa del último problema que ha aparecido en la vida de Rómulo, personaje interpretado por Joaquín Climent.

Durante los últimos días, y a pesar de la buena relación que siempre han mantenido, el mayordomo y su compañera Pía han protagonizado varios desencuentros dentro de palacio. 

A raíz de la llegada de Emilia a La Promesa, y tras darse cuenta del misterioso comportamiento del mayordomo, Pía decidió investigar sobre el pasado de su amigo. Gesto que provocó que la guerra estallara entre ellos.

Sin embargo, una profunda conversación con Catalina hizo reflexionar a Rómulo. Tanto es así que el personaje de Joaquín Climent no se lo pensó dos veces a la hora de pedirle disculpas a la doncella.

Además, y a raíz de dicha reconciliación, el mayordomo decidió hacer lo mismo con Emilia, un amor de su pasado. Pero ahora, y cuando parecía que la paz se había instalado entre ellos, ha sucedido algo dentro de La Promesa que puede llegar, incluso, a romper esta tregua.

Aparece un nuevo problema en la vida de Rómulo, el personaje de Joaquín Climent dentro de La Promesa

No hay duda de que el personaje de Joaquín Climent se va a convertir en el personaje principal del capítulo de hoy de La Promesa. Y es que, cuando parecía que Emilia y Rómulo habían aclarado sus malentendidos del pasado, un nuevo asunto amenaza con quebrar la confianza entre ambos.

Mientras tanto, Leocadia parece acercarse cordialmente a Eugenia, aunque sus intenciones no son tan nobles como aparenta. A escondidas, se alía con Lorenzo en un oscuro plan para deshacerse de Eugenia o internarla nuevamente en el sanatorio.

En otro frente, las joyas especiales de la Joyería Llop plantean un nuevo enigma para Curro y Lope, quienes, tras su última visita, se encuentran atrapados en un callejón sin salida. El misterio crece, y las respuestas siguen sin aparecer.

Por otro lado, y tras el regreso de Toño, Manuel y el hijo de Simona continúan trabajando en buena armonía. Sin embargo, el hijo de los marqueses Luján percibe cierto nerviosismo en su socio y la causa parece estar directamente relacionada con la constante presencia del sargento Burdina.

Por último, Catalina y Adriano han decidido posponer su salida de La Promesa hasta que el duque de Carvajal y Cifuentes se haya marchado. Y todo para que el aristócrata no descubra la existencia de su matrimonio.