Alejandra hija de Alberto Cortina y Elena Cué, debuta en la jet set

Alejandra Cortina Cué ha debutado como una de las 'herederas del gran poder'. La joven ha cumplido la mayoría de edad. Una fecha muy señalada que celebró por todo lo alto con una puesta de largo en la isla balear de Mallorca. Precisamente este destino fue el primero al que viajó junto a sus padres, la socialité Elena Cué y el empresario Alberto Cortina tras su nacimiento en el año 2006.

El evento tuvo lugar en 'Moncaire', la mansión de 1.500 metros ubicada en la finca familiar la cual está localizada en la localidad mallorquina de Fornalutx, en plena sierra de Tramontana. 

La lista de invitados no solo incluyó a amigos del entorno íntimo de la joven sino también a figuras tanto de la crónica social o de la cúpula empresarial nacional. Nombres como el presidente del Real Madrid Florentino Pérez o Nuria González, viuda del empresario Fernando Fernández Tapias, y sus dos hijos así como apellidos tan notorios como Marañón, March, Abelló, Gamazo, Entrecanales, Prado, del Pino. No faltó Myriam Lapique, tia y madrina de bautizo de la joven y viuda de Alfonso Cortina. 

Aunque a esta cita tan relevante no faltó la realeza puesto que los monarcas Máxima y Guillermo de Holanda asistieron en compañía de su hija la princesa Amalia de Holanda, gran amiga de Alejandra. Su presencia no fue casual ya que Elena Cué es una de las grandes amigas de la monarca holandesa, circunstancia por la que sus hijas han entablado una gran amistad. 

Desde que ha cumplido la mayoría de edad, Alejandra Cortina Cué mantiene un perfil bajo frente a los medios de comunicación a diferencia de otros 'cachorros de la jet set'. Pero, ¿cual es la historia de la heredera de Elena Cué y Alberto Cortina?. 

Alejandra, la heredera de Elena Cué y Alberto Cortina

El 10 de junio de 2000 la socialité Elena Cué y el empresario Alberto Cortina contraían matrimonio en la finca donde se conocieron, “Las Cuevas”, con 1.600 hectáreas de terreno y enclavada en los Montes de Toledo en los términos municipales de Hontanar (Toledo) y Navas de Estena (Ciudad Real). La Iglesia Católica ya había decretado la nulidad del primer matrimonio de Alberto Cortina con Alicia Koplowitz y el empresario había obtenido también el divorcio de su segunda mujer, la recientemente fallecida y mito de esa España de los años 80 Marta Chávarri, lo que le abría las puertas para contraer matrimonio canónico con la joven tiradora.

Seis años después de aquel enlace, concretamente el 1 de marzo, el matrimonio dio la bienvenida a su primera hija. Una niña a la que llamaron Alejandra, que nació en el Hospital San Francisco de Asís, de Madrid. Alejandra se convirtió en la primera hija de Cortina (ya que tiene tres varones de su primer matrimonio con Alicia Koplowitz y no tuvo ninguno con Marta Chavarri), aunque tiene nietas mucho mayores en edad que su hija.

El primer verano de 2006, con la niña recién nacida, la pareja lo pasó en Mallorca donde adquirieron una gran mansión en la zona de Sóller. La posesión que el matrimonio adquirió en ese precioso enclave mallorquín se llamó ‘Moncaire’, con cerca de cuatrocientas hectáreas de terreno y vides. En concreto, la finca está situada en el pequeño y bello pueblo de Fornalutx, a los pies del Puig Major, en la sierra de Tramontana, y muy cercano al puerto de Sóller y será donde Alejandra celebre su puesta de largo el próximo mes de junio. 

Como hemos mencionado anteriormente, Alejandra es una joven muy discreta y, de hecho, celebrará su debut ante la alta sociedad cuando termine sus compromisos educativos en el centro privado y católico de enseñanza francesa Union-Chrétienne de Saint Chaumond, regentado por monjas y ubicado en el exclusivo barrio madrileño de El Viso. En este centro ya estudiaron otras personalidades como la modelo madrileña Inés Sastre, la empresaria Alejandra de Rojas, hija de la exmodelo Charo Palacios, o Cari y Carla Goyanes, hijas de Carlos Goyanes y Cari Lapique. 

Campo, arte y un selecto círculo de amistades

Aunque aún se desconoce hacia dónde orientará su futuro, es muy probable que Alejandra escoja el ámbito del arte, una disciplina de la que su madre es gran aficionada. Alejandra siente pasión por su madre, a quien suele mostrar en algunas de las publicaciones de su perfil personal de la red social Instagram.

Es en esta plataforma donde también deja constancia de sus gustos o aficiones como la fotografía o la literatura, mostrando especial interés por las obras del chileno Pablo Neruda o del británico William Shakespeare. 

Como mencionábamos anteriormente, Elena Cué y Alberto Cortina contrajeron matrimonio en la Finca 'Las Cuevas', localizada en el enclave de los Montes de Toledo, por lo que, tal y como han publicado diversos medios de comunicación, pasar jornadas en el campo donde disfrutar de la naturaleza también es una de sus grandes aficiones.

Y como otros 'cachorros de la jet set', en el entorno de amistades de Alejandra no faltan nombres como Allegra y Cecilia de Hohenlohe, hijas de los duques de Tarifa Pablo de Hohenlohe y María del Prado. Y la diferencia de edad no es un impedimento para que la joven mantenga una excelente relación con todos sus primos. De hecho, fue una de las invitadas a las bodas de Felipe y Carlos Cortina, hijos de su tío Alfonso Cortina, fallecido en del año 2020, y de la socialité Miriam Lapique. 

Sin embargo, las figuras de la jet set o la aristocracia no solo están presentes en el círculo íntimo de la joven sino que ha sido entre la realeza donde Alejandra también ha forjado amistades. Una de sus íntimas amigas es la princesa heredera al trono de los Países Bajos Amalia de Holanda, quien sufrió amenazas por parte del clan criminal conocido como Mocro Maffia cuyo líder es Karim Bouyakhrichan. 

Este vínculo se forjó gracias a la amistad que mantiene Elena Cué con la reina Máxima de Holanda y, de hecho, durante la estancia de la primogénita de los monarcas holandeses en la capital española, tanto madres como hijas disfrutaron de diversos encuentros en restaurantes del epicentro capitalino. Ha sido este pasado 15 de junio cuando la joven Alejandra Cortina Cué debutó en la alta sociedad en la finca mallorquina a la que viajó por primera vez y ya ha pasado a formar parte de los 'cachorros de la jet set'.